Buscar la perfección para lograr llegar lejos en el mundo de la música. El Conservatori de Palma acoge desde el pasado 1 de julio la IV Acadèmia Internacional de Música de Palma de Mallorca, un evento que reúne a especialistas y alumnos de diferentes partes del mundo. La iglesia de Sant Felip Neri fue el escenario ayer de un concierto en el que los estudiantes demostraron lo aprendido, actuación que se repetirá hoy en el mismo lugar a las 20.00 horas.
Unos 40 alumnos de países como Japón, Alemania, Taiwan o Italia reciben las indicaciones de diferentes reconocidos pedagogos como los violinistas Patrice Fontanarosa y Gérard Poulet; el flautista José Daniel Castellón y el pianista Olivier Gardon. La academia nació gracias a dos entidades, la Associació d'Amics de l'Orquestra Simfònica de les Illes Balears, bajo el impulso de Ramon Andreu; y Art et Musique en Méditerranée, presidida por Philippe Bender.
«Cada alumno tiene la posibilidad de tocar diferentes veces ante el profesor, lo que le ayuda a mejorar su técnica», comentó Andreu. Para Andreu, la academia «ofrece una imagen turística de Balears de calidad» y, además, permite a los participantes extranjeros «conocer Mallorca y ver otra cultura». Los alumnos, de entre 17 y 25 años, terminan sus lecciones mañana. En las ediciones anteriores, el evento se realizaba en la Porciúncula. Gracias a la colaboración del Conservatori se ha trasladado al centro de Palma.