Académicos, familiares y amigos acompañaron al arquitecto Luis García-Ruiz cuando leyó su discurso de ingreso en la Reial Acadèmia de Belles Arts de Sant Sebastià. La capilla del convento de las Reparadoras, sede de las reales academias, fue el escenario para el acto de investidura del nuevo académico numerario, elegido por mayoría.
Perteneciente a una saga de arquitectos, el académico recibió la bienvenida de su padre, Antonio García-Ruiz, presidente de la institución. El veterano arquitecto dijo que si siempre resultaba emocionante recibir a un nuevo académico, la emoción era mayor «por tratarse de un hijo».
Entre el público que siguió el discurso de Luis García-Ruiz, y el de Pere A. Serra, académico numerario y presidente del Grup Serra, encargado de contestarle, estaban el escultor Joan Costa; el arquitecto Jaime García-Ruiz; el pintor Amador Magraner; la galerista Jero Martínez; el restaurador Pepe Pardo; los empresarios Fernando Rotger y Rosa Regi; Malén Pujol; Cecil Samberg; Cristina Macaya; Rafael y Chiqui Colomar; Pepe Oliver o el abogado Joan Nadal, entre otros.