El mismo día de su petición de mano Angelina, la hija del Brigadier, decide huir con su amante. «Es una niña ingenua, caprichosa, que no tiene nada en su cabeza», explicó Isabel Cabot, la actriz que interpreta el papel protagonista en la obra «Angelina o el honor de un Brigadier». La pieza se representa esta noche en el Auditòrium a las 21.00 horas a beneficio de la Sonrisa Médica.
Los 18 actores se subieron ayer por primera vez al escenario del auditorio palmesano. La mayoría de ellos nunca habían preparado ningún papel. Todos provienen de otros ámbitos profesionales, como la abogacía o la aeronáutica. «Son buenos aficionados, tienen unas voces maravillosas y muy buena dicción», aseguró Sebastián Frontera, director de la obra. La razón: su profesión. «Por mi trabajo, estoy acostumbrada a hablar en público», comentó la abogada Cabot. «Hacemos más comedia en un estrado que encima de un escenario».
El director trabajó, sobre todo, la interpretación y el saber estar. «He guiado sus movimientos, sus gestos, el lugar donde tenían que situarse», afirmó Frontera. La elección de Jardiel Poncela permitió a los actores acercarse al teatro desde el punto de vista cómico. «Poncela recoge toda la esencia de las piezas clásicas» siempre con un punto de innovación basado y centrado en lo «inverosímil», según el director. Pili Valicourt, Mª Luisa Figueras, Conchita Alemany, Pilar Casasnovas, Ticu Vidal, Pilar J. De Sentmenat, Carmen Ferragut, Paco mas, José Miguel de Campo, Laureano Arquero, Julio Santás, Paul Bertholle, Mateo Sanguino, Viquito Isasi, Roberto Fernández, Pepe Marroig y Ramón Sánchez-Cuenca completan el reparto. Después de la experiencia, tal vez alguno cambie su profesión por la interpretación.