MIREIA BALASCH
El amor, la belleza, la esperanza y la patria derraman de los
versos del poeta catalán Miquel Martí i Pol (Roda de Ter, 1929) y
han sido recogidos por 70 ilustradores catalanes provenientes de
todos los campos de esta disciplina. Las obras de estos dibujantes
conforman la exposición «Deixeu-me dir. Miquel Martí i Pol
il·lustrat», que podrá verse en la Casa Museu Llorenç Villalonga de
Binissalem del 8 de mayo al 16 de junio de este año. La Associació
d'Il·lustradors de Catalunya, con el apoyo de la Caixa de Sabadell,
decidió hacer este homenaje a Martí i Pol porque «es un de los
personajes más representativos de las letras catalanas, además de
uno de los poetas más queridos», explicó Gemma Cortabitarte,
gerente de la entidad.
La muestra consiste en una setentena de cuadros hechos por dibujantes de la asociación, como Pilarín Bayés o Francesc Rovira, ambos conocidos por su trabajo en el mundo de la ilustración infantil. Cada una de las obras se basa en un poema del escritor que los mismos dibujantes han escogido de una selección de 50 realizada por el filólogo Jordi Cerdà. Es por eso que hay 20 repetidos. La mayoría de poemas se han extraído de las obras «Antologia Poètica», «Temps d'interluni» y la trilogía «Obra poètica». Las ilustraciones están agrupadas en seis áreas, según la temática del verso: belleza, esperanza, amor, espacio, patria y muerte. Éstos son también los ejes principales de la obra del escritor catalán.
Cada autor ha escogido lo que es para él el verso más representativo del poema y en el cual se inspiró para hacer su trabajo. Así, acompañando las ilustraciones de Carme Julià y Lupe Guardia, se encuentra la cita tot el que és bell incita a la bellesa; en la de Gemma Salas, potser vindrà un altre matí més pur i ens serà retornada la tendresa, referida a la esperanza; y en la Mercè Arànega y David Maynar, el món sencer dins uns ulls que segueixen la teva mà quan dibuixes miratges, por ejemplo. También el título de la exposición tiene reminiscencias poéticas, ya que es el título de una pieza incluida en la «Antologia poètica». El centro de Binissalem es el segundo que acoge esta muestra itinerante, después de inaugurarse el pasado 16 de este mes en el Ateneu de Cerdanyola del Vallès.