Un inventario de la cultura de los sonidos. El «Anuari Musical de les Illes Balears 2000», presentado ayer, recoge la actividad registrada dentro del ámbito musical, desde los conciertos realizados a lo largo del año por los grupos isleños hasta los nuevos trabajos aparecidos. Se trata de una coedición entre la Conselleria de Cultura i Educació y la editorial Documenta Balear y podrá encontrarse en las librerías.
«El anuario servirá como base de datos para construir futuras valoraciones», explicó Damià Pons, conseller de Cultura del Govern. «El documento tiene sentido a partir de su continuidad», aseguró Fernando Merino, experto en música que ha participado en el libro. Según Merino, el trabajo incide en cuatro factores. El primero, «la cohesión». «En Balears existe un desconocimiento de la música que se hace en cada isla, por lo que el anuario puede fijar esta información». El segundo factor se centra en «la promoción»; el tercero en «la consulta» y, por último, el cuarto, en su intención de «termómetro de la actualidad».
El catálogo incluye las fichas de 16 grupos que, durante el 2000, tuvieron relevancia. «Se han escogido de diversos ámbitos musicales para que haya variedad», dijo Pere Muñoz, director general de Cultura del Govern. En las próximas ediciones, se incluirán nuevas formaciones. La información se complementa con entrevistas y artículos de opinión, más un listado sobre la programación que se desarrolló en los municipios, en los diferentes festivales y en las salas de conciertos y auditorios. Por último, puede encontrarse un listado con todos los trabajos discográficos aparecidos en 2000.