La idea surgió de una deuda con una amiga, a quien prometió escribirle un texto más largo. El por qué de más líneas nació de un trabajo anterior en el que la actriz amiga sólo tenía una frase. Cuando tuvo que desarrollar la idea originaria, el escritor y colaborador de Ultima Hora Gabriel Sabrafín decidió ampliar su campo de acción y rendir «un tributo a una generación ilustre de veteranos». El resultado, «Vell amic de banús», una pieza que acaba de ser galardonada con el Premi Teatre Principal de textos teatrales, dotado con 3.000 euros y otorgado por el CIM.
La historia parte de una acción. Teresa, la única protagonista, sufre un tirón en la calle. Para defenderse, pega con su bastón al ladrón y entra en su casa corriendo. Acto seguido, las dudas hacen acto de presencia. «Teresa se pregunta qué le habrá pasado al hombre», aseguró el autor. A partir de ese instante, empieza un monólogo con dos objetos, su bastón y un retrato de su marido, que le sirven para repasar su vida. «No me considero un autor teatral», comentó Sabrafín. Ésta es su tercera incursión en el mundo del teatro, tras una primera que fue «un fracaso estrepitoso». «'Benet Esteve', estrenada en 1985, pecó de demasiado literaria».
En ese momento decidió dejar de lado el mundo del teatro y adentrarse en la novela y otros géneros, hasta que decidió saldar su deuda con su amiga. «El personaje protagonista es una mujer de más de 80 años, que pertenece a ese colectivo de personas mayores que han tenido una vida difícil y que han sabido dejar atrás todos los obstáculos», comentó el autor. La protagonista utiliza sus dos interlocutores por «necesidad». «No sabe si le ha hecho daño o no al ladrón», por lo que necesita desahogarse con alguien. El bastón le sirve como «culpable del daño causado», ya que «él ha pegado al hombre». El retrato, para «recordar tiempos pasados, la guerra y cuando su marido la abandonó».
La obra está escrita en clave de comedia. Las partes más dramáticas, como cuando Teresa habla sobre la soledad, se resuelven «de manera irónica», según Sabrafín. «Es natural, realista, busca la identificación del público». El principal problema para su representación es, para el autor, «la dificultad de encontrar una actriz mayor que pueda hacer lo que le pido». Debe saber bailar, cantar, recitar poemas e, incluso, conocer el arte de la esgrima. «El teatro es magia, seguro que hay algún director que podría conseguirlo». El premio incluye «la promoción de la edición o la puesta en escena en un periodo de dos años», dijo Sabrafín. Ahora sólo cabe esperar ver la obra plasmada en un escenario.