Son tiempos de vacas flacas y todo el mundo debe apretarse el cinturón. Con esta filosofía acepta Carmen Feliu, regidora de Cultura de Cort, la partida presupuestaria asignada a su departamento para 2002, 1.587.673.997 de pesetas, 59.388.000 más que el año pasado.
La moratoria también hará mella en Cort, donde se ingresará menos dinero que en 2001, por lo que Feliu admite que se trata de unos presupuestos «continuistas» aunque en Cultura hay «algunos pequeños incrementos». La concejala confía que hacia abril «nos caiga algo con la redistribución del superávit». Si todas las áreas «han tenido que apretarse el cinturón, yo no me puedo quejar», añade. En el área específica de Cultura, Feliu tendrá 391.645.997 de pesetas, 30 más que en 2001. Dentro de esta cifra, y con la ayuda de patrocinadores, la concejala comenta que «quiero hacer una gran exposición en el Casal Solleric, una exposición brillante al año, esto es seguro, y otra en la Fundación Pilar i Joan Miró». En cuanto a la primera «le he dicho a Joan Carles Gomis que se ponga a trabajar en ello». Será además de la programación que está en marcha, como publicó Ultima Hora , en la que en el Solleric predominan revisiones de la obra de artistas locales de distintas generaciones.
Feliu apunta como positivo que se han incrementado «un poco» las partidas para adquisición de obras de arte, que considera imprescindible «a la hora de hacer fondo porque si te paras en determinado momento luego te faltará representación de esa etapa». La concejala recuerda que Cort es la única institución que sigue comprando.