Rincones de Mallorca, algunos muy escondidos y otros no tanto. Masrexach se dedicó, el pasado año, a buscar paisajes por la isla que luego trasladó a los lienzos. Los 40 óleos que nacieron de sus paseos se han visto en una exposición en la Cartoixa de Valldemossa que finaliza hoy.
«Quise incidir en el color ya que, para mí, si no hay color no hay cuadro», comentó Masrexach. Rojos, amarillos y verdes se unen para dar vida a los cuadros. Los golpes de luz también son importantes en sus piezas. «Los busco y los escojo para luego poder plasmarlos», dijo el pintor.