Papa Levante, un grupo formado por seis adolescentes gaditanas de Sanlúcar de Barrameda, que ya ha conseguido doble disco de platino con su archiconocido tema «Me pongo colorada», actuó ayer en Son Servera. Gala, Iren, Sandra, María, Pao y Sonia ya conocen Mallorca. «Actuamos en la última Feria de Abril y firmamos discos».
Además de una gran amistad que nace en la más tierna infancia, a algunas de las integrantes de Papá Levante les unen lazos de sangre y el gusto por una estética post"Almodóvar muy divertida. Se declaran sanluqueñas hasta la médula, aunque reconocen que «ahora, nuestra casa está en los aviones, en los trenes y en los autobuses».
No se plantean la grabación de un segundo disco «hasta no haber explotado más éste», según declararon. También comentaron que estarán de gira por todo el país «hasta el próximo octubre y después, si es posible, queremos saltar el charco. Nuestro disco ya se ha publicado en Argentina y tenemos mucha ilusión de tocar allí».
Aparte de «Me pongo colorada», otros temas a destacar son «Jacaranda», en el límite de lo flamenco y lo morisco; «Practicar sexo», con la más pegadiza de las letras, y su verdadero grito de guerra, «Toma Papá Levante», que no permite la tranquilidad ni de las caderas ni de las posaderas. Otro rasgo de identidad del sexteto son los «gimiks», trabalenguas explosivos del tipo «tritiquitiquitrí quitiqui triquitrán», «tomaquetomaquetomaquetoma» o «1, 2, 3 y 4 me aprietan los zapatos», una prueba de fuego para los diplomados en filología hispánica.