La Academia de Bellas Artes de Sant Sebastià cuenta oficialmente desde ayer con un nuevo miembro, Josep Prohens, músico, compositor y director del Conservatorio, quien, nervioso, leyó un discurso de entrada titulado «Impacte Sociocultural dels Conservatoris».
En el mismo abordó referencias históricas sobre el nacimiento de dichos centros en Europa; la regulación de las enseñanzas musicales en España a través de leyes y decretos y su impacto en Balears; la creación del Conservatorio palmesano, hasta llegar a la actualidad, con la implantación del «esperado» grado superior, un viejo anhelo hecho realidad en 1999, y la inauguración de la primera fase del nuevo edificio.
La sede de la Academia se llenó de público, gente del mundo musical, profesores y personal del Conservatorio, amigos de Felanitx, su pueblo natal, y autoridades. El acto fue presidido por Maria Antonia Munar y Antonio García-Ruiz, presidente de la institución. Los académicos Juan Miralles y Neus García-Iniesta acompañaron a Prohens al estrado y Bernat Julià fue el encargado de responderle. El fundador de la Capella Mallorquina calificó a Prohens como compositor de «fina sensibilidad», y no olvidó su labor al frente del Conservatorio hasta la implantación del grado superior, «coronación de la escala musical docente».
El Conservatorio Superior se creó «cuando nadie esperaba que fuese posible», dijo Prohens, quien recordó que el próximo curso se implantará como asignatura la pedagogía del lenguaje musical. Su discurso tuvo un tono reivindicativo cuando señaló: «Espero que, bien pronto, se implanten casi todas las especialidades del grado superior y que la Conselleria de Educación aporte los medios necesarios para llevar adelante este proyecto, ya que nuestra comunidad no puede quedar coja en unos estudiosa que van en su propio beneficio».