Desde hace 20 años que los conciertos de Los Secretos son esperados como un acontecimiento entre los amantes del pop español de calidad. No en vano entre sus composiciones se encuentran tres de las mejores canciones pop en español de todos los tiempos: «Déjame», «Sobre un vidrio mojado» y «Buena chica».
Ayer, Los Secretos, acompañados de una pléyade de artistas invitados de la calidad de Guillermo Porcel (La Granja), Cristina Lliso (Esclarecidos) Jaime Anglada, Àngel Frau y Tumbaos, grupo mallorquín que presentó su excelente primer disco, inundaron de melancolía el Auditòrium con el concierto homenaje al tristemente desaparecido Enrique Urquijo, compositor y cantante del grupo madrileño.
Durante la rueda de prensa, su hermano Àlvaro, flanqueado por los otros dos integrantes del grupo, Jesús Redondo y Ramón Arroyo, dedicó unas palabras emocionadas a Enrique Urquijo y a lo duro que resulta seguir sin él. «Cuando murió Enrique estábamos rotos y durante la grabación de este disco homenaje y de la gira que lo acompaña hay constantemente momentos muy bonitos y otros muy tristes». Sobre el futuro no se quieren predecir nada. Àlvaro Urquijo añadió que «como hicimos siempre, nunca nos planteamos los discos con antelación. Para mí, este disco homenaje es mi futuro y mi final pero durante la gira hemos podido llegar a la conclusión que el grupo está más vivo que nunca».