Construir de manera más saludable y confortable es el objetivo de la arquitectura bioclimática, un modo de entender la edificación sobre el que la sección de Cultura del Colegio de Arquitectos de Balears ha organizado unas jornadas para el próximo mes de octubre y que, en febrero de 2001, se ilustrará con una exposición sobre arquitectura medioambiental organizada por el Consejo Superior de Arquitectos.
Las Jornadas sobre Arquitectura Bioclimática, dedicadas a la vivienda, y la exposición antes mencionada, son el inicio de una serie de actuaciones que emprenderá el Colegio y que continuarán con encuentros dedicados a arquitectura bioclimática y centros de enseñanza y, también, construcción turística.
Los arquitectos Angel Hevia y Luis Velasco, que ha llevado adelante este proyecto, señalaban: «No se trata de promover ningún estilo, ni de adjetivar la arquitectura, sino de fomentar actitudes y proporcionar recursos técnicos que nos permitan desarrollar una arquitectura sensible a sus moradores y al entorno en el que se construye. Una arquitectura que se relacione bien con el lugar, que permita disfrutar de sus condiciones climáticas, sin huir de ellas, y sin olvidar que estos elementos: sol, vientos, humedad, temperatura, no son obstáculos, sino algunas de las razones de ser de la arquitectura».
Porque, una correcta disposición del edificio en el lugar que permita una buena captación de la radiación solar y del régimen de brisas son sus pilares básicos y «los recursos de la arquitectura para vivir mejor», comentaba ayer Hevia. Y apuntaba que el clima de Mallorca permite «vivir así en un 90 por ciento».