La «capelleta» de Sant Vicenç Ferrer, una de las treinta que hay en
diferentes calles de Palma, ya está restaurada.
Un convenio entre ARCA, el Ajuntament de Palma y Sa Nostra ha
permitido, hasta ahora, la restauración de ocho de estos ornamentos
religiosos, entre ellos esta pieza neogótica. La capelleta de Sant
Vicenç estaba ubicada en la Costa de Can Muntaner "una travesía de
la calle Sant Miquel", pero será reemplazada en breve en una calle
muy próxima, Can Perpinyà.
El jefe de Gestión Social i Cultural de Sa Nostra, Andreu Ramis, aseguró ayer que «hay un hecho importante. El patrimonio urbano no sólo se configura por grandes monumentos. Las ciudades medianas, como Palma, tienen un pequeño patrimonio notable que otorga a la ciudad un espíritu, un alma y una significación simbólica: un sentir de identidad urbana y ciudadana».
La pintura de la «capelleta» ha sido restaurada por Maria del Mar Riera Vallés, siguiendo un procedimiento complejo. En primer lugar, se desmontó la tela, después se fijó una capa pictórica, más tarde se reenteló y se volvió a montar en el bastidor. Por otra parte, se ha realizado una nueva fornícula de marés. La «capelleta» dispondrá de un vidrio protector y de un sistema de iluminación.
Hasta ahora han sido rehabilitadas las capillas de Sant Sebastià, Eccehomo, Mare de Déu del Carme (c/Teresetes); Mare de Déu del Carme (c/Can Pinós), Octava estació del Via Crucis; Purísima Concepció, Immaculada y la citada anteriormente.