El Govern de les Illes Balears y la Generalitat de Catalunya pondrán en marcha en el plazo de nueve meses el Institut Ramon Llull, organismo estable de cooperación en materia de política lingüística, que tendrá el objetivo de coordinar políticas lingüísticas, la promoción del conocimiento del catalán y el fomento de su uso y la difusión de esta lengua en el Estado español, Europa y el mundo.
La creación de este organismo forma parte de las iniciativas en materia de política lingüística que se recogen en un convenio marco firmado ayer por el conseller d'Educació i Cultura del Govern de les Illes Balears, Damià Pons, y el conseller de Cultura de la Generalitat de Catalunya, Jordi Vilajoana. Este convenio está orientado a que ambos gobiernos «pongan en común sus recursos y conseguir que la lengua propia sea conocida y utilizada en todos los ámbitos sociales y que tenga a una proyección internacional notable», manifestaron los dos consellers.
Según Jordi Vilajoana, la idea es que «la creación de este instituto esté refrendado por los parlamentos de las dos comunidades y el del Estado, así como que en su financiación participen las dos Conselleries, pero también el Estado», declaró. En este sentido, Damià Pons insistió en que «el Estado tiene el deber de promover el uso y la proyección exterior de las 4 lenguas oficiales y no ha hecho nada hasta la fecha». El acuerdo afecta a diez ámbitos de la política lingüística, como son la planificación lingüística, enseñanza en catalán a los adultos, evaluación del conocimiento de la lengua en los ámbitos de la toponimia y onomástica, cinematografía, terminología, industrias de la lengua, sociolingüística, proyección exterior y formación de personal y de técnicos.