«Un poeta no tiene por qué ser una persona tranquila», aseguró Laura Moll Rexach, ganadora del accésit del prestigioso premio de poesía Adonais por su obra «Océano», una selección de 10 de sus mejores composiciones en verso.
Laura, de 16 años y estudiante de tercero de BUP en el colegio San Cayetano de Palma, reconoce que «soy una persona bastante inquieta, nerviosa. Aunque cuando escribo me desahogo». El primer premio lo ganó la filóloga Irene Sánchez Carrón, de 32 años, con su poemario «Escenas principales de un actor secundario».
El fallo del jurado se leyó ayer en un acto público, celebrado en la Casa de América de Madrid. Alvaro Fierro Clavero, un ingeniero de 34 años, ganó otro accésit por «Tan callando». A la 54 edición del Premio Adonais concurrieron 173 originales, de los cuales 18 llegaron a ser finalistas, según el criterio del jurado. «No me esperaba que me diesen este premio. La verdad es que me presenté gracias a un profesor mío de literatura, que me animó mucho», dice Laura.
Según Pureza Canelo, miembro del jurado, «es increíble la fuerza y hondura con la que escribe». Desde su creación han sido galardonados poetas como Claudio Rodríguez, José Hierro, Ricardo Molina y José Infante, entre otros, y han formado parte del jurado otros como Vicente Aleixandre, Gerardo Diego o Dámaso Alonso.
Laura dice que «el premio me ha impactado mucho, aunque no me gusta salir por la radio, la prensa y todo eso. La poesía es otra parte de mí, la escribo porque la necesito. En este caso me he inspirado en una persona a través de la contemplación del mar».