El Santuario de Lluc ha repartido carteles para dar a conocer a los vecinos de los pueblos de Escorca, Campanet, Mancor y Caimari que «faltan blavets para cantar a la Mare de Déu», e invita a los padres a inscribir a sus hijos de 8 o 9 años a la escolanía.
Desde finales de la década de los ochenta, el número de niños que forman el coro ha disminuido. Concretamente, este curso el coro estará integrado por 35 voces, seis menos que el año pasado.
El descenso de natalidad y el incremento de escuelas que ofrecen una formación musical completa son las dos causas principales que explican el importante descenso de niños interesados en formar parte del tradicional coro. Así lo explica el prior del santuario, Gaspar Alemany, quien además comenta que «desde los ayuntamientos se está promocionando la educación musical con la apertura de escuelas de música y bandas locales».
La editorial de la revista «Comunicació Lluc» en su última edición reflexiona sobre la importancia histórica de la escolanía y el grupo coral y vocacional de los blavets formado por niños mallorquines cuyo canto va dirigido a la Mare de Déu.
La falta de vocación es otro de los temas que preocupa al prior: «Los niños no pueden formar parte de nuestro coro cuando su voz es ronca y vienen presionados por sus padres».