La pintora mallorquina Maria Antònia Cerdà expone en la galería Claudio Coello 22 de Madrid una muestra de su creación más reciente, que se caracteriza por «poner todo el énfasis en la vibración y la fuerza que contiene el color», en palabras de la propia artista. Cerdà expone en Madrid una treintena de obras realizadas entre 1998 y 1999 y de variada temática.
«Para mí el color es muy importante, pues es un elemento con el cual se puede transmitir energía, fuerza y emotividad», asegura la pintora, que acompaña sus obras de un trazo fuerte, enérgico, con muchas capas de color que ayudan a dar contraste.
Maria Antònia Cerdà ha triunfado en Madrid, donde muchas obras se vendieron incluso antes de colgarse. Su última gran exposición en Palma fue en el Casal Balaguer, en 1997. Ahora tiene ganas de montar otra, aunque todavía no hay nada concretado. «Me gustaría que fuera una exposición con un tema concreto, es decir, con una coherencia temática. Mi idea es la de realiar una exposición sobre la intimidad femenina», explica la pintora.