AGENCIAS-LONDRES
El veterano actor británico Dirk Bogarde, estrella de películas
inolvidables como «Muerte en Venecia» de Luchino Visconti y «El
sirviente» de Joseph Losey, falleció ayer en Londres, a los 78
años, según anunció su familia.
Su sobrino, Brock Van den Bogaerde, dijo que el actor sufrió un paro cardíaco en su hogar de Londres. Bogaerde agregó: «Mi tío era profundamente feliz, esperaba celebrar su 80 aniversario y tenía muchos planes para el futuro». Estoy seguro de que no hay mejor manera de retirarse», concluyó Bogaerde. Durante su carrera estelar participó en unas 70 películas.
Después de haber cumplido cincuenta años Dirk Bogarde comenzó una segunda carrera, la de novelista, también con éxito. Su último libro, de carácter autobiográfico, «For The Time Being» fue publicado en 1998. Publicó siete volúmenes de su autobiografía y otras siete novelas, que se convirtieron rápidamente en best-sellers. «Nunca me gustó mucho actuar "dijo una vez", pero me ha hecho ganar dinero».
Bogarde, hijo de un periodista del periódico de Londres «The Times» y de una actriz, nació en Hampstead, en 1921 y se subió por primera vez a un escenario en 1939, a los 19 años. Trabajó en algunas películas muy renombradas, entre ellas «Muerte en Venecia» y «La caída de los dioses», de Luchino Visconti, y «Portero de noche», de Liliana Cavani.
Encarnó en varios de sus filmes el tipo de inglés elegante y
frío.
Fijó su domicilio en Francia durante veinte años "donde trabajó
como granjero y escritor" y sólo cuando su íntimo amigo y manager,
Tonu Forwood, enfermó gravemente en 1986 y quiso permanecer a su
lado durante su hospitalización, abandonó el país galo para
regresar al Reino Unido. Hace tres años sufrió un infarto. Fuentes
familiares agregaron que en el momento de su muerte estaba
acompañado de una enfermera.
Siempre había dicho que a la hora de su muerte quería que sus cenizas fueran lanzadas al viento en Francia.