El Pleno de las Juntas Generales de Álava ha reclamado un nuevo estatus político de relación entre Euskadi y el Estado español que recoja «el derecho a decidir, el reconocimiento de Euskadi como nación» y «la bilateralidad en las relaciones con el Estado», así como «garantizar la voz de Euskadi en las instituciones europeas en todas aquellas materias que se le reconozcan como competencias propias».
PNV y EH Bildu han sumado sus votos para aprobar una enmienda transaccional a una propuesta original de la formación abertzale que ha contado con la abstención de Elkarrekin Araba y la negativa del PSE-EE, PP y Vox, en el pleno celebrado este miércoles en Vitoria-Gasteiz.
Así, las Juntas Generales de Álava siguen el camino emprendido en las cámaras forales de Bizkaia y Gipuzkoa, que ya aprobaron en esta legislatura iniciativas en el mismo sentido, para que «el nuevo estatus política de Euskadi recoja el derecho a decidir y el estrechamiento de relaciones con el resto de territorios vascos».
El texto acordado demanda también «la actualización del autogobierno vasco», que «el Estatuto actual se cumpla en su integridad y recuperar el autogobierno reducido en la experiencia autonómica».
Por otro lado, solicita «incrementar el 'quantum' competencial en relación con todas las competencias previstas en el estatuto vigente e incluir en el catálogo propio de competencias todas las competencias necesarias, para garantizar los derechos políticos, económicos, sociales, lingüísticos y culturales de la ciudadanía vasca».
"soberanía vasca"
La portavoz de EH Bildu, Eva Lopez de Arroyabe, ha demandado «aprovechar la ventana de oportunidades abierta en el Estado español, para que se hable de la plurinacionalidad del Estado y se empiecen a abrir las puertas que hasta ahora han estado cerradas», ante el «evidente agotamiento del marco autonómico».
«Hay quien dice que tenemos suficiente autonomía, pero todo lo que podemos decidir siempre depende del marco estatal», ha argumentado, para citar «las políticas de vivienda, currículo educativo, el sistema sanitario, los impuestos y las políticas lingüísticas», entre otras.
«El derecho a decidir del pueblo vasco es un asunto fundamental en la política y en la sociedad vasca. La soberanía reside en el pueblo vasco, por lo que las personas que vivimos y trabajamos en Euskal Herria creemos que es legítimo poder decidir democráticamente nuestro futuro político. No hay un debate más sano y necesario que el ejercicio del a la autodeterminación», ha reivindicado.
Por su parte, el portavoz del PNV, Iñaki Ruiz de Galarreta, ha señalado que «queda fuera de toda duda» la postura de su partido «respecto a los derechos que reclama». y ha destacado «el papel determinante del PNV» para llevar adelante el Estatuto de Gernika, «a pesar de tenido que luchar por conseguir cada transferencia, cuando esto debiera haberse completado hace muchísimo tiempo».
«Más autogobierno significa más sociedad, mejores servicios públicos, más desarrollo, y prueba de ello es que nos hemos convertido en una sociedad de las más avanzadas de Europa, con ratios que nos confirman en esa posición», ha recalcado.
Ruiz de Galarreta ha reclamado «el reconocimiento de Euskadi como nación, el respeto a la diversidad, el derecho a decidir y la bilateralidad en las relaciones entre Euskadi y el Estado; así como que el actual autogobierno debe superar el marco Euskadi-Estado, de manera que se garantice la voz de Euskadi en las instituciones europeas», una petición «alineada con las aprobadas en otros territorios».
"fractura social"
Por contra, el portavoz del PSE-EE, Josu López Ubierna, ha señalado que su formación «está en la actualización del autogobierno» y ha descartado «meterse en ninguna aventura independentista y soberanista que abona la fractura social» en Euskadi.
«Los socialistas confiamos en la sociedad más que en las naciones y los pueblos, porque al fin y al cabo tenemos que dar respuesta a las necesidades de todos y cada uno, indiferentemente de que se sientan muy nacionales, muy de pueblo o poco más o menos de cualquier condición», ha manifestado López Ubierna.
El portavoz del PSE-EE ha rechazado «el ideario nacionalista» y ha reivindicado «la responsabilidad de los socialistas con el Estatuto», al ser «el único partido» de la Cámara alavesa «en votar la Constitución». «Los socialistas vascos, alaveses y españoles tenemos una responsabilidad política e histórica con el Estatuto que asumimos, además de sentirnos orgullosos de la construcción nacional del Estatuto», ha agregado.
El portavoz del PP, Iñaki Oyarzabal, ha lamentado que «el nacionalismo alimente la fractura y la división social», y ha indicado que «las decisiones sobre la soberanía plena corresponden al conjunto del pueblo español», así como que «lo demás es no respetar las reglas del juego y la democracia, ya que significa vulnerar el derecho a decidir del resto de los ciudadanos españoles que son los titulares de la soberanía».
«El PP defiende el autogobierno al servicio de la ciudadanía. Un autogobierno que garantice el pluralismo de nuestra sociedad y la convivencia y que respete la legalidad. Respetar la legalidad significa respetar la Constitución y el derecho a decidir no está reconocido ni recogido en ninguna legislación internacional», ha replicado.
Por su parte, el juntero de Vox Jonathan Romero ha repudiado un tema que «abre nuevas divisiones, alienta viejas heridas y promueve un proyecto basado en la ruptura de España», dentro de una moción «con un contenido separatista y excluyente que busca imponer una visión sesgada y parcial de la historia y de la realidad de España».
«España es una nación indivisible y una unión que ha resistido siglos de historia y que se fundamenta en la diversidad de sus regiones, respetando siempre su cultura y tradiciones, pero dentro de una España unida. Es importante recordar que ningún territorio ni Álava ni la Comunidad Autónoma Vasca, ni ninguna otra región de España, tiene el derecho de autodeterminación. El derecho a decidir pertenece a todos los españoles», ha zanjado.
"reconocimiento entre diferentes"
Por último, el portavoz de Elkarrekin Araba, David Rodríguez, ha abogado por «celebrar una ponencia del autogobierno que diera como resultado un texto de fuerte carga política que no rebase el marco legal». «Para nosotros, defender el autogobierno es defender los servicios públicos, apostar por lo común y blindar los derechos de toda la ciudadanía, pero creo que para ustedes no es eso», ha añadido, para explicar la abstención de su grupo.
«Apoyamos la consideración de Euskadi como una nación en consonancia con nuestra apuesta por la configuración de España como un Estado plurinacional y plurilingüe y reivindicamos el derecho a decidir, entendido como el derecho de todas las personas, a expresar su voluntad libre y democráticamente, como un elemento fundamental de cualquier sistema democrático, impulsando la aplicación de este derecho de una manera legal y pactada, pero creemos que para el reconocimiento de la realidad plurinacional no hay más hoja de ruta posible que el reconocimiento mutuo entre diferentes», ha argumentado.