La Asamblea de Madrid ha dado luz verde este jueves a la comisión de investigación para dilucidar si hubo «nepotismo» en el trato de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, con su petición de comparecencia y la del jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, en el aire.
En este Pleno se ha rechazado con los votos de Vox y PP el escrito de oposición presentado por PSOE contra esta comisión, anunciada en el mes de junio días antes de las elecciones al Parlamento Europeo argumentando su voluntad de «devolver el buen nombre» a la Universidad Complutense de Madrid que, a sus ojos, estaba siendo afectado por la publicación de noticias relativas a la cátedra que dirigía Begoña Gómez.
En los pasillos de la Asamblea el portavoz del PP, Carlos Díaz-Pache, ha insistido en que el objetivo de este espacio es «saber qué pasó, qué está ocurriendo con los programas de cátedras y másteres en la UCM y en otras universidades madrileñas», especialmente con aquellas que dirigía Begoña Gómez.
«Una de las universidades más importantes de España ha sido manchada por la necesidad de la esposa del presidente del Gobierno de medrar profesionalmente sin tener la cualificación para dirigir ni esos másteres ni esas cátedras», ha espetado Díaz-Pache.
Por su parte, el portavoz del PSOE, Juan Lobato, ha defendido la oposición de su partido, sustentada en los antecedentes en la Asamblea y en la autonomía universitaria que «impediría que se celebrara este tipo de comisión».
Lobato ya era consciente de que esta comisión saldría adelante, especialmente desde que el lunes Díaz-Pache insistiera en ello. Es por ello que los socialistas madrileños han coordinado «milimétricamente» tanto con Ferraz como con el Gobierno su participación y abordaje de esta comisión en la que defenderán «las posiciones justas y lógicas».
También ha mostrado su rechazo la portavoz de Más Madrid, Manuela Bergerot, al considerar que la comisión no es para «investigar el estado actual de la UCM». Ha explicado que ellos preferirían que lo que se estudiara fuera cómo financiarla y «dejar de recortar derechos a los universitarios» y no seguir con el «teatro».
La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, ha insistido en la importancia de evitar que la credibilidad de la universidad española esté «en entredicho y se escuche hablar mal de ella» por «prácticas presuntamente ilegales».
«Es una vergüenza que, por el mal uso de los políticos y la corrupción y la injusticia de dar cátedras a quien no las merece, frente a otros que se han estudiado y se han trabajado para eso, se manche el nombre de la universidad española», ha lanzado.
Los comparecientes, en el foco
Tras la aprobación se nombrará a las personas que formarán parte de este comisión por parte de los grupos, a los que se les solicitará el listado de los comparecientes. Este punto ha sido uno de los que ha estado en el foco este jueves.
PP ha insistido en un mensaje que ya trasladó el lunes, que llamarían a todos aquellos que pudieran «arrojar luz» sobre el funcionamiento de las cátedras como personas de la universidad, relacionadas las empresas «a lo mejor patrocinadoras o de las que hayan elaborado el software de estos programas» que no se sabe «muy bien por qué se estaban haciendo de esa manera».
Díaz-Pache no ha confirmado ningún nombre propio de los que barajan los 'populares', pero ha afirmado que no descartan llamar a la mujer del presidente del Gobierno.
También ha advertido de que «no va a aflojar» Vox, quien ha apuntado que conformará su lista con aquellos que puedan aclarar la situación y que no solo de respuestas «mediáticas» sino que también hablen de "el proceso.
«Begoña Gómez realmente es uno de los perfiles que pueden arrojar luz, pero hay muchas personas involucradas en el procedimiento de obtención de esa cátedra que nos tienen que explicar en base a qué parámetros lo hicieron», ha remarcado Rocío Monasterio.