La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal dedicada a las estafas piramidales que logró obtener más de 339.000 euros de pequeños inversores. En la operación llevada a cabo para desmontar este grupo, los agentes han detenido en Benidorm (Alicante) a cuatro personas, dos hombres y dos mujeres mayores de edad que habían creado un entramado de empresas nacionales e internacionales sin actividad comercial y webs de contenido de inversión de alta rentabilidad económica.
Los detenidos, con edades comprendidas entre los 31 y los 61 años y de origen español, son presuntos autores de los delitos de estafa, apropiación indebida, publicidad engañosa, pertenencia a grupo criminal y blanqueo de capitales, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
La investigación que ha llevado a desarticular el citado grupo delictivo y a las detenciones mencionadas se originó en el mes de junio del año pasado por parte de agentes de Policía Judicial, cuando un hombre presentó una denuncia en la Comisaría de Benidorm en la que manifestaba que había invertido 21.000 euros con un bróker de las finanzas.
La Policía Nacional ha detallado que «este supuesto gurú financiero» prometía y aseguraba un 10 por ciento mensual en las empresas ficticias que había registrado, así como inversiones puntuales con una rentabilidad del 20 por ciento en días. A su vez también animaba a invertir en una empresa de oro, donde se obtendría la cantidad del 23 por ciento mensual.
La víctima explicó que pasados los seis meses necesarios de inversión quiso retirar el dinero aportado más los intereses generados, algo a lo que los impulsores de la operación se negaron argumentando que era necesario continuar con las ganancias para generar más intereses a su favor. Esa indicación hizo desconfiar de los inversores, ha destacado la policía.
El denunciante decidió poner el suceso en conocimiento de las autoridades policiales pasado un año y en vista de que no cobraba el dinero depositado.
A partir de la información recibida, los investigadores comenzaron a recabar datos y lograron acreditar el modus operandi de los detenidos, que consistía en crear una empresa en España con la que abrirían una cuenta bancaria.
Estas personas se valdrían de los denominados testaferros u hombres de paja. Su labor era la de crear la empresa y transferirla pasado un tiempo ya con una o varias cuentas bancarias con operativa online, así como enviar todo el dinero obtenido a cuentas ubicadas en Lituania.
En las webs de inversión falsas, aparentemente empresas ubicadas en Londres, los pequeños inversores accedían con su nombre de usuario y contraseña, visualizaban su zona personal donde veían el importe supuestamente invertido y las posibles ganancias, además del porcentaje de rentabilidad, ha señalado la Policía Nacional.
Asimismo, ha apuntado que sin más información sobre las supuestas inversiones, desconociendo dónde se encontraba el dinero y qué acciones o participaciones tenían, las víctimas --inversores-- debían contactar con los autores del hecho para solicitar la retirada de dinero.
Los policías corroboraron que los investigados llevaban operando desde 2021 con más de ocho empresas ficticias utilizando, para obtener y traspasar el dinero obtenido, ocho cuentas corrientes de bancos ubicados en España y una cuenta corriente en Lituania donde acabaría todo el capital estafado.
Finalmente, los investigadores lograron identificar y detener a todos los responsables del grupo criminal, que tras su arresto pasaron a disposición de la autoridad judicial.