Los resultados obtenidos en campaña de excavación 2024 pueden considerarse «los más espectaculares de los últimos años», destacando la gran cantidad de restos de carnívoros y de proboscídeos (antiguos elefantes), así como la calidad de los útiles en piedra tallada.
Así lo han expresado el delegado de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta en Granada, Fernando Egea y el director del proyecto de Orce, el arqueólogo Juan Manuel Jiménez Areas tras la segunda iniciativa en Venta Micena 4, Barranco León, donde se recuperó el diente humano más antiguo de Europa occidental y Fuente Nueva 3, lugar donde murió el gran macho de mamut conocido con el Titán del Pleistoceno.
La fauna y los útiles en piedra tallada encontrados permitirán avanzar en la investigación del porqué Orce fue un centro neurálgico para los primeros pobladores del continente europeo. Herramientas retocadas y recicladas, forman parte de las piezas destacadas de esta campaña y piezas insólitas como una muela de leche de un mamut de menos de un año.
Además, se ha contado, gracias a la empresa Excom, con un nuevo sistema de registro que permite la comunicación inmediata entre los especialistas de los distintos yacimientos.
En definitiva, Juan Manuel Jiménez Arenas ha manifestado que la última campaña de excavación en los yacimientos de la Zona Arqueológica 'Cuenca de Orce' vaticina un año cargado de sorpresas, sobre todo enfocadas en entender cómo se relacionaban nuestros antepasados más lejanos con el entorno y entre ellos mismos.
Por otra parte, el vicerrector de Innovación Social, Empleabilidad y Emprendimiento de la UGR, Esteban Romero, ha destacado que las campañas de Orce son una referencia internacional en arqueología, algo que «repercute en la proyección del territorio».
Además, el vicerrector ha señalado la importancia de la transferencia a la sociedad de los hallazgos que se realizan en los yacimientos: «Tiene un alto impacto cultural y social que la gente pueda conocer en detalle los trabajos que se realizan en Orce y su alcance».
Paralelamente, se ha llevado a cabo una intensa labor de difusión del conocimiento a través de las cuatro charlas del ciclo ¡Bares, qué lugares! y tres días de jornadas de puertas abiertas a las que asistieron más de 200 personas. Además, se ha recibido la visita de los productores de Arqueomanía, programa que incluirá Orce en uno de los capítulos de la temporada 2025.
En definitiva, la última campaña de excavación en los yacimientos de la Zona Arqueológica 'Cuenca de Orce' vaticina un año cargado de sorpresas, sobre todo enfocadas en entender cómo se relacionaban nuestros antepasados más lejanos con el entorno y entre ellos mismos.
Venta micena 4
En el corte 4 de Venta Micena esta mítica localidad, el equipo, liderado por José Yravedra (Universidad Complutense de Madrid) y Juan Manuel Jiménez Arenas (UGR), ha trabajado, en primer lugar, en la regularización de la superficie de excavación. Para su seguimiento se ha contado con un diario 3D del yacimiento consistente en una toma de imágenes y una reconstrucción virtual georreferenciada al final de cada jornada de trabajo.
«Así se documenta y evalúa el proceso de excavación y nos permite tomar mejores decisiones en el día a día», comenta Darío Herranz, investigador predoctoral de la UGR y encargado de esta tarea. La prolífica esquina noroeste se ha despejado de fósiles en casi su totalidad. No obstante, aún queda mucho trabajo por hacer puesto que la riqueza de esta zona es inagotable, asegura Eva Montilla, responsable de restauración y conservación.
De entre todos los elementos recuperados en esta zona destaca dos huesos de la pata de un Megantereon, un tigre dientes de sable que habitó las tierras de Orce hace 1,6 millones de años. También dos astas de ciervo gigante. En el lado opuesto del yacimiento, se ha exhumado una escápula de mamut, perteneciente a un individuo de gran tamaño. En la zona central del corte de excavación se ha detectado y extraído un conjunto de mandíbulas de caballo, bisonte y cánido.
Barranco león
La excavación se ha continuado en el sector sur de este importante yacimiento donde se encontró el diente de leche humano más antiguo de Europa. Tal y como previó José Solano (UGR), director de esta excavación, se trata de la zona más rica excavada hasta la fecha.
«Las expectativas del año pasado, se han convertido en realidades», afirma el investigador. Entre las herramientas fabricadas por los primeros europeos resalta una gran lascas tallada en sílex de alta calidad que presenta un filo trabajado en su parte central.
Es lo que en el mundo de la Arqueología se denomina un denticulado, útil tradicionalmente asociado al trabajo de la madera. Junto a él, un gran canto trabajado en cuarzo, materia prima inédita en Orce hasta 2024, con el que sirvió como percutor (martillo para tallar otras rocas) y como utensilio para machacar o triturar, puesto que una parte dejar ver un intenso repiqueteo.
A los más de mil fragmentos de hueso y dientes de grandes mamíferos se suman partes de caparazón de tortuga y útiles humanos tallados en piedra. Entre los primeros destaca un metápodo (hueso de la pata) de un ancestro de las cabras de edad juvenil y un fragmento de molar de Mammuthus meridionalis.
Se trata de un descubrimiento muy interesante puesto que los proboscídeos son muy escasos en este yacimiento. Por otra parte, se ha vuelto a preparar un nuevo espacio que se comenzará a excavar en la campaña 2025.
Fuente nueva 3
El yacimiento más joven, con 1,2 millones de años de antigüedad, de los excavados en 2024 ha estado a la altura de los otros dos. Desde un punto de vista general, se ha alcanzado el nivel 2 en el que se prevén grandes resultados, sobre todo en lo que ha útiles líticos se refiere.
«Los trabajos se han extendido también al nivel 5, donde se encuentran los colmillos del Titán del Pleistoceno», aclara Deborah Barsky, del IPHES-CERCA de Tarragona. En materia de animales extintos, muy cerca, espacialmente hablando, de aquellos, se ha desenterrado un espectacular húmero (hueso del brazo) de un mamut de tamaño pequeño, aunque adulto.
Por otra parte, uno de los fósiles más asombrosos ha sido un molar de Mammuthus meridionalis de un individuo de menos de un año, al que se ha bautizado como el Hijo de Amparito. Su reducido tamaño contrasta con la gran importancia debido a su escasez en el registro. Además, se ha encontrado un colmillo de oso.
En materia de actividad humana la campaña ha sido, igualmente, prolífica con piezas que cuentan historias y que serán cruciales para entender la complejidad del comportamiento humano hace 1,2 millones de años. Dos artefactos han captado la atención de los investigadores. El primero, una herramienta en caliza y de gran porte que presenta un filo trabajado que dota a la pieza de una hipnótica simetría. El otro, una gran lasca que fue usada, luego convertida en núcleo y finalmente reciclada.