El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha afirmado este martes que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su mujer, Begoña Gómez, son el «fango y cash» de la política española y ha hecho un test de «regeneración democrática» a la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Reyes Maroto.
Desde el Pleno del Palacio de Cibeles de este mes de julio, Almeida ha asegurado que la estrategia política de Maroto será «objeto de una tesis doctoral» en el futuro, tras preguntar al regidor por su compromiso con la regeneración democrática, en la semana en la que la mujer del presidente «se ha negado a declarar» y el presidente «va a tener que declarar» ante un juez.
«Tiene verdadero mérito. A mí, la verdad, es que su defensa de la pareja presidencial, también conocida como fango y cash en estos momentos en España, me parece conmovedora», ha expresado el alcalde.
«¿Usted piensa que la mujer del presidente del Gobierno tiene un asistente que puede llamar al rector de la Universidad Complutense para que comparezca en el Palacio de la Moncloa? Sí o no. ¿Piensa que es correcto que la mujer del presidente del Gobierno le pida al rector de la Universidad Complutense que le cree una cátedra extraordinaria sin cumplir los requisitos? Sí o no. ¿Piensa que es correcto que la mujer del presidente del gobierno se reúna con el presidente de Indra para que le financie un software? Sí o no», ha preguntado Almeida.
También le ha preguntado a la portavoz socialista si piensa que es correcto que la mujer del presidente registre a su nombre y obtenga «un lucro económico de un software que es propiedad de la Complutense».
Maroto considera que almeida es "el rey del bulo"
Por su parte, Maroto ha criticado que Martínez-Almeida se haya convertido en «el rey de la descalificación y del bulo, diciendo mentiras y contribuyendo con ello a erosionar la confianza en la ciudadanía de la democracia».
«Su extremismo le ha hecho perder la educación, el respeto y la cortesía. Ha preferido usted ser parte de la máquina del fango, que solo busca el desprestigio de personas o instituciones, pero sobre todo que dañan y deterioran la democracia», ha censurado.