Nestlé España invertirá 22 millones en construir una segunda caldera de biomasa de su fábrica de café en Girona que entrará en funcionamiento en 2025 y que, unida a la ya existente, permitirá evitar más de 18.000 toneladas de CO2 en estas instalaciones, donde trabajan 870 personas.
Lo ha explicado este lunes el director general de Nestlé España, Jordi Llach, en una comparecencia ante los medios junto al responsable de sostenibilidad de la empresa, Miguel Antúnez.
Llach ha defendido este tipo de inversiones: «Si realmente crees en la sostenibilidad, que es nuestro caso, no te paras porque el año vaya mejor o peor. Son inversiones de nivel, pero es la manera. El impacto sólo es real si se hace en toda la cadena».
En esta planta de Girona se elabora el café soluble Nescafé y cápsulas Nescafé Dolce Gusto y el año pasado se generaron 52.000 toneladas de posos de café, y en estas instalaciones ya funciona desde 2020 una primera caldera, que supuso una inversión de 17 millones.
La nueva pretende revalorizar el 100% de los posos de café que se obtienen en el proceso de fabricación del café soluble y usará también como materia prima astillas forestales procedentes de la limpieza de los bosques gestionados de forma sostenible cercanos a la fábrica, «reduciendo así la dependencia del gas natural», ha dicho Antúnez.
En los últimos cinco años, la planta de Girona ha reducido un 45% las emisiones de CO2 y un 23% el consumo total de energía, y con la entrada en funcionamiento de la segunda caldera se evitarán más de 18.000 toneladas de CO2, incrementando un 30% la reducción de emisiones.
Llach ha asegurado que, para Nestlé, la sostenibilidad es crucial desde el inicio del proceso, es decir, en el uso de los ingredientes que generan el 70% de las emisiones.
De ahí que la «piedra angular» sea la agricultura regenerativa, que la empresa aplica en 7 países y que consiste en minimizar el consumo de agua y en el cuidado y mejora del suelo, una acción en la que trabajan con la Fundación Global Nature.
El uso de camiones con biocombustible (procedente de aceites usados) ha permitido a Nestlé reducir el 80% de las emisiones en el transporte.
"denunciar el 'greenwashing"
Llach ha defendido las normas europeas sobre 'greenwashing': «Estamos a favor de denunciar el 'greenwashing' y saber si estamos haciendo algo que no está bien. Comunicativamente no somos expansivos. Nosotros respetamos al 100% la regulación, estamos a favor de estandarizar lo que está bien y lo que no, porque es uno de los problemas».
En 2023, Nestlé invirtió un total de 70 millones en sostenibilidad en sus 10 fábricas de toda España.