El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, ha dicho que será necesario apuntalar el edificio del Casco Viejo cuya cubierta se ha derrumbado esta mañana, aunque no hay riesgo de colapso del inmueble ni para los edificios colaterales, por lo que la calle Tendería, donde se ubica el inmueble, se abrirá «en breve».
Aburto se ha desplazado hasta el número 24 de la calle Tendería, donde a las diez y media de esta mañana se ha derrumbado parte de la cubierta de un edificio de cinco alturas en obras de rehabilitación y, como consecuencia, cinco operarios que trabajaban en la obra han resultado heridos.
El alcalde ha explicado que, tras la inspección realizada por técnicos de Surbisa y Bomberos, se ratifica que «hay que apuntalar el edificio», aunque ha señalado que «no es necesario hacer un apuntalamiento de urgencia en este momento», por lo que se esperará a que lo realice personal de la empresa promotora encargada de las obras de rehabilitación.
Según ha precisado, el apuntalamiento es necesario para que el desescombro «se produzca en una situación de seguridad necesaria para la realización de esa actuación».
Por otro lado, ha confirmado que la licencia de obra estaba «bien concedida» desde el pasado mes de enero para las obras de rehabilitación de cuatro viviendas de uso residencial. Además, ha añadido que, «dado que no hay riesgo ni para los edificios colaterales ni para la propia fachada y no hay riesgo de colapso», se abrirá la calle «en breve».
En cuanto a los cinco heridos, Aburto ha confirmado que dos han sido trasladados al Hospital de Cruces y otro al de Basurto. Uno de los trabajadores afectados por el derrumbe rescatado por los bomberos y personal sanitarios «parece que tiene rotura de cadera y fémur, aunque hay que esperar a que se realice la valoración médica necesaria», ha indicado el alcalde.