El centro cultural CaixaForum Zaragoza de la Fundación 'la Caixa' acoge la exposición 'Top secret. Cine y espionaje', en una nueva colaboración con la Cinémathèque française, que explora la historia inédita de los vínculos entre el oficio de actores y de espías.
El juego de espejos entre cine y espionaje es el punto de partida de este viaje cronológico-temático que se realiza a través de 176 piezas de diversos formatos y 90 clips de películas, abarcando un siglo de relación: desde Mata Hari hasta Carrie Mathison, pasando por James Bond y Edward Snowden.
El director corporativo del Área de Cultura y Ciencia de la Fundación 'la Caixa', Ignasi Miró; el director de CaixaForum Zaragoza, Ricardo Alfós, y los comisarios Alexandra Midal y Matthieu Orléan han presentado este jueves 'Top Secret. Cine y espionaje' en CaixaForum Zaragoza.
Coorganizada por la Fundación 'la Caixa' y La Cinémathèque française, la exposición propone un viaje entre las relaciones del cine y el espionaje en un recorrido cronológico-temático que abarca todo un siglo.
Tras su paso por La Cinémathèque française, en París, y por CaixaForum Madrid y Barcelona, la muestra llega a CaixaForum Zaragoza hasta el 25 de agosto de 2024, para luego viajar a CaixaForum Sevilla y Valencia.
Programación cultural
Dentro de su programación cultural, la Fundación 'la Caixa' dedica una atención preferente a las manifestaciones artísticas más características del siglo XX y XXI. En esta línea se enmarcan las exposiciones dedicadas al cine.
Así, la entidad ha dedicado retrospectivas a grandes nombres del mundo del cine y a compañías pioneras como Pixar o Disney. Gracias a la colaboración con La Cinémathèque française, se han presentado con anterioridad en CaixaForum Zaragoza proyectos conjuntos como George Méliès.
A través de las figuras de espías emblemáticos, desde Mata Hari hasta Carrie Mathison, pasando por James Bond y Edward Snowden, la exposición se infiltra en las relaciones entre cine y espionaje durante más de 100 años.
La muestra recupera el papel de la mujer espía, más allá del estereotipo del sexpionaje ampliamente explotado en el mundo del cine.
Siguiendo un recorrido cronológico, desde finales del siglo XIX hasta la actualidad, y mediante ámbitos diferenciados, la exposición presenta un conjunto de 176 piezas que establecen un diálogo entre 'gadgets' --herramientas-- de cine, artefactos históricos, documentos de archivo, clips de 90 películas.
Durante el recorrido, se abordan la historia de las técnicas desplegadas por los agentes de los servicios de inteligencia y el papel singular que tuvieron las espías entre 1870 y la caída del telón de acero, así como sus representaciones cinematográficas, el nacimiento del mito del espía moderno durante la Guerra Fría --principalmente a través del personaje de James Bond--, la evolución de la figura del agente secreto en relación con las transformaciones geopolíticas de la década de 1970 y, finalmente, la aparición de nuevas formas de espionaje encarnadas por los alertadores que solo obedecen a sus propios valores en un contexto de vigilancia generalizada.
La exposición hace un esfuerzo por incluir títulos de la cinematografía española del género como El Lobo, de Miguel Courtois, Mataharis, de Icíar Bollaín, y Estambul 65, de Antonio Isasi-Isasmendi, y un fragmento del documental Garbo, el espía, de Edmon Roch, entre otros, además de carteles españoles de filmes internacionales.
Vigilancia y espionaje
El aspecto participativo y de mediación ocupa un lugar destacado en la muestra, reforzado por una museografía inmersiva: el visitante se implica en una investigación que abarca juegos de encriptado y diferentes paradas que quieren expandir noción de vigilancia y espionaje a la experiencia del espectador para que el espectador se convierta en espía y a la vez en un ser espiado.
De hecho, los títulos de cada ámbito expositivo están inscritos en la pared a través de un código que solo puede leerse cuando un foco de luz dorada pasa por encima.
A través de preguntas y diferentes elementos, la muestra quiere convertirse en un espacio de reflexión y análisis de los temas y debates que presenta la exposición, así como busca convertirse en un espacio en el que el espectador «sea espiado» y en la que se simule la recogida de datos e imágenes de los visitantes, que se muestran al final.
Top secret: más allá de las salas de exposición
La exposición se complementa con un catálogo y un surtido de innovadoras actividades durante los meses en los que permanecerá la muestra en CaixaForum Zaragoza para que todos los públicos puedan acercarse al universo del espionaje desde distintas perspectivas.
El pistoletazo de salida será este jueves con un diálogo entre el comisario Matthieu Orléan y el periodista Pedro Zapater.
Durante el mes de mayo tendrá lugar un ciclo de conferencias sobre la historia secreta del siglo XX, que arrancará el 7 de mayo con 'El laboratorio del espionaje: la Primera Guerra Mundial en el escenario español'; el 14 de mayo llegará el turno del 'Espionaje antijaponés en China, Birmania y Tailandia en la Segunda Guerra Mundial'; el 21 de mayo, una conferencia bajo el título la 'Incorporación de las mujeres al Servicio de Inteligencia Español: un gran reto profesional', y, finalizará el 28 de mayo con la charla 'El espionaje británico y Franco (1936-1945)'.
Además, se proyectará una retrospectiva de películas: 'Alarma en el expreso', de Alfred Hitchcock, el 2 de mayo; 'Garbo, el espía', de Edmon Roch, el 9 de mayo; 'La mujer del espía', de Kiyoshi Kurosawa, el 23 de mayo; 'Bajo el fuego', de Roger Spottiswoode, el 30 de mayo, y 'La vida de los otros', de Florian Henckel Von Donnersmarck, el 6 de junio.
También en el marco de la exposición, el centro cultural acogerá talleres y espectáculos, conciertos y un escape room familiar, así como visitas guiadas para diferentes públicos y edades.