La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha realizado una visita técnica a los trabajos de reparación integral del firme de 35 kilómetros de la autovía A-92 en la provincia de Granada, desde el límite con Málaga hasta Moraleda de Zafayona, en el Poniente de Granada.
Los trabajos, que se encuentran en un grado de ejecución del 30 por ciento, están suponiendo la reducción de carriles en días laborables vía 'transfer', de tal modo que el tráfico en los dos sentidos pasa a una sola calzada. Son unas alteraciones de la circulación que se mantendrán hasta el próximo mes de julio, según ha detallado la Junta en una nota de prensa tras la visita.
La titular andaluza de Fomento ha comprobado cómo los trabajos desarrollados hasta ahora son tareas de saneo, es decir, de reparación de los tramos más deteriorados de la A-92 y las actuaciones en los enlaces.
«Los conductores verán que ahora hay tramos recién asfaltados con tramos sin actuar, pero sólo es una primera fase, ya que en torno a un mes y medio se procederá al extendido del ancho completo de la autovía», ha afirmado.
Esta actuación abarca 35 kilómetros, entre los puntos 176 y 211, entre los términos de Loja, Salar, Huétor Tájar y Moraleda de Zafayona. Estos tramos presentan un elevado tráfico, con una media de hasta 32.000 vehículos al día, de los que un 18 por ciento son tráfico pesado.
Para su ejecución, se han dividido los contratos en tres tramos. Los transfers se desarrollan de lunes a viernes y finalizan a las 13,00 horas del viernes para que no incidan en las franjas de más volumen de tráfico (fin de semana), en una decisión que ha sido consensuada por la Junta de Andalucía y la Dirección General de Tráfico.
Los proyectos, con un coste de 16,4 millones de euros financiados por fondos europeos React-EU, consisten en el refuerzo del firme para «rehabilitarlo estructuralmente y, con ello, corregir los desperfectos de la vía y mejorar su seguridad vial».
Así, se extenderá una nueva capa de rodadura a lo largo de toda la longitud del tronco de autovía y en los ramales de acceso y salida de la autovía, así como de las vías de servicio de ambas márgenes de la autovía localizadas en el tramo.
En los tramos del tronco de autovía en donde el firme se encuentra «muy deteriorado», según han detallado desde la Junta este viernes, se ha practicado un fresado de ocho centímetros de espesor, así como la reposición con ocho centímetros de mezcla bituminosa en semicaliente, usando los denominados Materiales Asfálticos Sostenibles Automatizados e Inteligentes (en concreto Masai II).
De igual manera, se ha proyectado la reposición de toda la señalización horizontal, tanto en el tronco de la autovía como en los ramales de los enlaces. Se completará con la ejecución, en las bandas izquierda y derecha, en ambas calzadas de la autovía, de «huellas sonoras».
También se sustituirá la señalización vertical que se encuentra en mal estado, así como algún cartel de lamas. Para esta reparación se han utilizado los Masai desarrollados por el Laboratorio de Ingeniería de la Construcción de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad de Granada y que la Consejería de Fomento está aplicando para la mejora de las carreteras de titularidad autonómica con criterios de sostenibilidad.
Díaz ha estado acompañada en esta visita técnica por el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, el delegado del Gobierno andaluz en Granada, Antonio Granados, el director general de Infraestructuras Viarias de la Consejería de Fomento, Alfonso Lujano; y el concejal de Educación, Cultura y Relaciones Institucionales lojeño, José Antonio Gómez, entre otros.