Cinco unidades sanitarias del Área de Gestión Sanitaria Nordeste de Granada han recibido este jueves la certificación de calidad por parte de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (ACSA), entidad de la Consejería de Salud y Consumo encargada de impulsar la calidad y la mejora continua en el sistema sanitario.
En concreto, se trata de las unidades del Hospital de Baza de Cirugía General y Especialidades Quirúrgicas, y Salud Mental, y de las unidades de atención primaria de Benamaurel, Purullena y Baza.
El acto de entrega de los certificados, que se ha celebrado en el hospital bastetano, ha contado con la presencia de su director gerente, Pedro Ruiz Lorenzo, y del director de la ACSA, José Ignacio del Río Maza de Lizana. Asimismo, han asistido los responsables y profesionales de las unidades certificadas.
Durante el acto, los responsables de estas unidades han recogido en representación de sus equipos los certificados que acreditan la finalización de sus procesos de certificación, culminados todos con la obtención del nivel 'Avanzado', el primero de los tres niveles del modelo de la ACSA, que contempla una progresión desde el 'Avanzado', al 'Óptimo' y de éste al 'Excelente'.
Hay que destacar que la unidad de Baza ha conseguido su primera certificación, mientras que las demás han renovado el distintivo de calidad que ya obtuvieron en años anteriores.
Con este reconocimiento, las unidades demuestran su compromiso con la excelencia y la mejora continua del servicio que ofrecen a la ciudadanía, garantizando que su actividad se ajusta a los estándares de calidad definidos en los manuales de certificación de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía.
Estos criterios de calidad evalúan aspectos referidos a la eficacia y eficiencia de los servicios, la seguridad de pacientes y profesionales, la accesibilidad y continuidad asistencial, la atención basada en la evidencia, y el control de instalaciones y equipamientos.
A través de la autoevaluación que las unidades han realizado sobre los estándares de la ACSA, y que se ha ratificado en unas visitas de evaluación, el proceso de certificación ha constituido, además de un reconocimiento, una oportunidad de aprendizaje y crecimiento, que en este caso ha permitido identificar y desarrollar unas 50 acciones de mejora.