El Ayuntamiento de Madrid ha realizado un diagnóstico del estado de conservación de la Fuente de Neptuno, en el céntrico Paseo del Prado de la capital, para valorar una posible intervención para mejorar su aspecto.
Así lo ha informado la delegada de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, en una entrevista con Europa Press, en la que ha señalado que también se han iniciado estudios sobre el Arco de la Victoria en Moncloa para valorar si hace falta una intervención.
«La recuperación del patrimonio es una obligación. Madrid tiene tantísimo que hay que establecer prioridades. Tenemos varias posibilidades sobre la mesa y se harán de oportunidad y disponibilidad», ha indicado la delegada.
En concreto, ha señalado que el Arco de la Victoria era propiedad de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) hasta hace dos meses aunque ahora el Ayuntamiento sí prepara una intervención. «Son menores, evidentemente que los la de la Puerta de Alcalá que era muy escandalosa», ha recordado, a lo que ha añadido también la remodelación del Monumento a Alfonso XIII en El Retiro, que tiene «una panorámica fabulosa».
En esta línea, ha recordado que este mismo Jueves Santo reabre sus puertas el frontón del Beti Jai, tras casi un siglo desde que acogió su último partido de pelota y al filo de su 130 aniversario, en el que «no habrá que ir con cita previa, podrán ir todos los ciudadanos, habrá visitas guiadas, programas especiales para niños y, además, en verano se abrirá también un centro de interpretación dentro del frontón para explicar lo que fueron los frontones en Madrid».
El Arco de la Victoria es obra de los arquitectos Modesto López Otero y Pascual Bravo Sanfeliú, en conmemoración de la victoria del ejército nacional sublevado en la Guerra Civil, durante la batalla de Madrid. Los 40 metros de altura y sus ocho plantas fueron inaugurados en 1956. Está formado por muros de hormigón en masa con cuerpo central de hormigón, revestidos de granito.
Por su parte y junto a Cibeles, Neptuno es una de las fuentes más importantes de Madrid. Como parte del proyecto original de Ventura Rodríguez, ambas fuentes fueron, en un principio, enfrentadas mirándose la una a la otra en un lateral del Paseo del Prado.
La paternidad de la escultura no está muy clara, ya que fue encargada a Juan Pascual de Mena, escultor que murió antes de completarla, sin embargo, existen documentos que acreditan que la obra fue continuada por su discípulo José Arias. Con la fuente de Apolo, de las Cuatro Estaciones y la de Cibeles, formaba parte de la decoración para el Salón del Prado proyectado por Carlos III.