Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y Agentes de la Inspección Pesquera de la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía, adscrita a la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural han intervenido un total de 10.161 kilos de la especie choco en unas instalaciones frigoríficas de Huelva capital.
Según informa el Instituto Armado en una nota, esta intervención se enmarca dentro del Plan Anual de Control Integral de Actividades Pesqueras (Paciap), donde las patrullas del Seprona de la Guardia Civil y los inspectores de Pesca de la Junta de Andalucía trabajan de manera coordinada desde hace años.
En concreto, a finales de febrero los agentes detectaron en unas instalaciones frigoríficas de Huelva una partida de la especie choco (Sepia officinalis) congelados dispuestos en diferentes palets procedentes de Francia y que no se encontraban etiquetados, por lo que no cumplían los requisitos mínimos de información.
Ante estos hechos se procedió a la inmovilización temporal de la mercancía y se inició un periodo de recopilación de información para conocer la trazabilidad de los productos almacenados dispuestos para su comercialización.
Así, después de un estudio «minucioso» de la información obtenida, que ha durado más de diez días, los agentes pudieron constatar que esta mercancía, carecía totalmente de trazabilidad alguna y que no quedaba acreditada su procedencia, por lo que consideran que podría provenir presuntamente de la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (pesca INDNR), que «sigue siendo una de las mayores amenazas para los ecosistemas marinos como consecuencia de su poderosa capacidad para socavar los esfuerzos nacionales y regionales encaminados a una ordenación sostenible de la pesca, así como las iniciativas destinadas a la conservación de la biodiversidad marina».
Al respecto, la Guardia Civil ha señalado que tales productos se comercializan en España sin cumplir con lo establecido en el Reglamento Europeo No 1224/2009 de 20 de noviembre de 2009 por el que se establece un régimen comunitario de control para «garantizar» el cumplimiento de las normas de la política pesquera común, «produciéndose así una competencia desleal con los productos andaluces en este caso».
En base a estas investigaciones, se decomisó un total de 10.161 kilos de chocos congelados y se procedió al levantamiento del acta correspondiente proponiendo para sanción a los operadores implicados.
La mercancía incautada ha sido destinada al Banco de Alimentos de Huelva, que previa certificación veterinaria dará garantías de su seguridad para el consumo, y serán distribuidos en comedores sociales.