Una manifestación de varios centenares de agricultores han cortado, con tractores, el paseo de la Independencia de Zaragoza para exigir cambios en la Política Agraria Comunitaria (PAC) que permitan volver a aplicar las medidas de hace diez años.
Procedentes del entorno del palacio de La Aljafería, sede de las Cortes de Aragón, donde se han concentrado desde primera hora de la mañana para exigir, sin éxito, que les recibiera el presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, o el consejero de Agricultura, Ángel Samper, han recorrido el centro de la ciudad hasta llegar a la plaza de España y han seguido por el paseo de la Independencia hasta la plaza Aragón, donde han comenzado a disolverse.
La cabecera de la manifestación ha portado una pancarta en la que se podía leer «Salvemos al Campo. El campo está en lucha. Agricultores y Ganaderos de Teruel». No obstante, los manifestantes, ataviados con chalecos fluorescentes, han acudido desde distintas comarcas de Aragón.
También han encabezado la marcha un par de bombos y varios tambores del Bajo Aragón, que junto al claxon de los tractores, los silbatos y 'vuvuzelas' han provocado un ruido ensordecedor que ha llamado la atención de todos los viandantes que los grababan con sus móviles.
La movilización ha obligado a cortar la circulación del tranvía por esta arteria principal de Zaragoza que ha afectado a las paradas desde Cesar Augusto a Gran vía.
Volver a la pac de hace 10 años
El agricultor Agustín Cortés, de la Comarca del Jiloca (Teruel), ha explicado que el motivo de esta concentración espontánea y no autorizada por la Delegación del Gobierno en Aragón obedece al «hartazgo que los agricultores tenemos de la Comisión Europea y del Gobierno Español y del Gobierno Aragonés, que nos toman por delincuentes, nos tienen superfichados, nos tienen haciendo papeles todo el día en vez de trabajando en lo que tenemos que trabajar».
Ha criticado que la burocratización se ha puesto a unos niveles «insoportables» al argumentar que «ahora quieren hacernos un cuaderno digital en el que tenemos que subir todos los días todo lo que hacemos. Nos van a tener superfichados y supercontrolados».
Ha lamentado que, a pesar de llevar casi un mes de movilizaciones, «no se ha flexibilizado ninguna medida» y ha añadido que «solo ponen parches», como el aprobar «unos pequeños índices de barbecho, pero solo son promesas y más promesas».
Además, ha añadido que «están negociando con los sindicatos, que ahora mismo representan una minoría, porque los sindicatos también son culpables». «Siempre han estado ahí los mismos sindicalistas. Desde que mi abuela era agricultora ya estaban los mismos sindicalistas en el puesto», ha lamentado.
Ha reconocido que procede de un sindicato agrario, pero le ha «defraudado» al argumentar que «en Europa llevan ya tres meses manifestándose y, mientras, los sindicatos estaban por ahí, de vacaciones».
Al consejero Ángel Samper le ha exigido que «lo primero es que pague la PAC y que le diga a ministro Planas que traslade a Bruselas todas las medidas que exige el sector primario».
«Desde Aragón tienen que hablar con el ministro y el ministro con la Comisión Europea para volver a la PAC que teníamos hace 10 años, que era manejable, era entendible, porque los agricultores siempre hemos cuidado al medioambiente. Si no fuera por nosotros no habría nada», ha agregado.
Ha explicado que las diferencias entre esa PAC de hace 10 años y la que tienen que aplicar conlleva un aumento de las imposiciones ecológicas «brutales», que hacen que las explotaciones sean «totalmente inviables».
Reflexión ciudadana
La aprobación de la Ley de la Reforma de la Naturaleza la ha calificado de «barbaridad», porque en España no llueve y «tenemos que tener presas, tenemos que tener regadíos, porque si no, no producimos comida y ellos quieren que haya peces por el río, que haya flores, pero que no se produzca».
La actual PAC «se ha impuesto desde los países del norte de Europa y se han pasado con la fuerza que ha cogido la ecología, cuando los mejores ecologistas somos los agricultores».
La repercusión de la PAC vigente es que «hace un mayor daño» al sur de Europa. «Esa ley nos perjudica mucho más a nosotros que a los franceses y a los alemanes, porque allí les llueve, entonces como les llueve no les preocupan los humedales, ni les preocupa nada, ellos tienen de todo porque tienen agua», ha aseverado.
Sobre las cláusulas espejo, ha comentado que «los alemanes producen lavadoras y Mercedes y venden a Argentina y a Marruecos y a nosotros nos utilizan de conejillos de indias porque traen productos importados de esos terceros países sin ninguna medida sanitaria. Son productos que están totalmente adulterados porque aquí los tenemos sanos y allí los tienen adulterados, pero como les venden productos industriales, los países ricos del norte de Europa, pues nosotros nos tenemos que tragar los tomates de Marruecos y las naranjas de Sudáfrica y de Argentina».
Han concluido a trasladar una reflexión al conjunto de la sociedad: «Los ciudadanos europeos no saben que esos productos sí que tienen pesticidas y sí que son peligrosos, mientras que los europeos, los que producimos nosotros no».