El devastador incendio que arrasó un doble edificio conformado por 138 inmuebles en la calle Maestro Rodrigo del barrio valenciano de Campanar y dejó 10 víctimas mortales cumple este jueves una semana mientras continúan los trabajos de los bomberos, las investigaciones de Policía Científica y los realojos de los vecinos afectados.
El fuego se originó el pasado jueves, sobre las 17.30 horas, en el apartamento 86 del bloque más alto y transcurrida apenas una hora, las llamas habían devorado los dos bloques de viviendas, de 10 y 14 plantas, en las que vivían unos 450 vecinos. Como consecuencia, 10 personas fallecieron y otras 15 resultaron heridas, entre ellas, siete bomberos. Todos los heridos han recibido el alta.
A raíz del incendio declarado en estos edificios construidos en 2009 --época del boom inmobiliario-- por una promotora que quebró, se puso en marcha toda la operativa de emergencias --bomberos, policías, sanitarios, forenses-- y se abrió una causa judicial para investigar lo ocurrido y determinar las causas del fuego, que se propagó en tiempo récord.
Transcurrida una semana del siniestro, bomberos permanecen en los edificios --un equipo de entre siete y ocho efectivos-- y continúan asegurando los bloques, eliminando elementos que puedan desprenderse y revisando las viviendas de lo que ya son dos esqueletos de pisos en el barrio de Campanar. Además, desde hace dos días acompañan a los afectados a recuperar las pertenencias que con desigual suerte se han podido salvar del fuego, según han informado a Europa Press fuentes municipales.
Todos los bomberos que participaron en la extinción del fuego siguen trabajando con normalidad a excepción de los siete efectivos que resultaron heridos y que permanecen de baja laboral.
Respecto a los afectados, un total de 100 vecinos pidieron ocupar una de las viviendas de un edificio municipal habilitado por el Ayuntamiento de València en Safranar, en el distrito de Patraix. A día de hoy ya están ocupadas más de 80 viviendas por 151 personas adultas y 38 menores y está previsto que este mismo jueves se concluya con los realojos de todos aquellos solicitantes de casa.
Se trata de un edificio de 131 viviendas que adquirió recientemente el consistorio por derecho de tanteo para destinarlo a alquiler asequible. Desde el pasado viernes por la tarde y durante todo el fin de semana han estado adecuando los pisos y dotándoles de los servicios de luz y agua para que pudieran ocuparse, con la colaboración de numerosas empresas. A día de hoy, una única persona sigue alojada en el hotel que también ofreció el consistorio tras el suceso.
Primeras ayudas
Por otro lado, las víctimas del incendio han comenzado a recibir también este jueves las primeras ayudas dispuestas por la Generalitat valenciana para que puedan hacer frente a gastos de primera necesidad, que suponen entre 6.000 euros y 10.000 euros en función de los miembros de la unidad familiar.
El Gobierno valenciano aprobó el pasado lunes un primer paquete de ayudas a los afectados del incendio de Campanar por un valor total cercano a los cuatro millones de euros: 1,38 millones para gastos de primera necesidad y otros 2,48 millones para ayudas al alquiler.
Asimismo, habrá ayudas directas para hacer frente a los gastos de alquiler de vivienda oscilarán entre los 1.000 euros y los 1.500 euros en el mes y por una duración máxima de un año para propietarios de la vivienda afectada y de tres meses para los inquilinos, mientras que los que quieran adquirir un nuevo inmueble tendrán el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales al 0% y habrá una exención definitiva de las dos últimas anualidades del cánon de saneamiento, entre otras.
Próxima semana, reunión
La próxima semana está prevista una reunión con la comunidad de propietarios para estudiar los pasos a seguir con los edificios incendiados, las medidas a adoptar y los peritajes. Este encuentro será clave para ver qué se hace, han explicado a Europa Press desde la Administración de Fincas de los edificios afectados.
A nivel policial, efectivos de la Policía Nacional junto a Policía Científica y la Comisaría Central de Policía Científica de Madrid continúan investigando las causas por las que se originó el fuego, aunque inicialmente se apunta a un cortocircuito. Cuando los agentes finalicen sus investigaciones, las remitirán al juzgado encargado del procedimiento.
Por su parte, a nivel judicial, es el Juzgado de Instrucción número 9 de València el encargado del procedimiento, sobre el que ha decretado el secreto de sumario durante un mes --finalizará el próximo 23 de marzo--. El secreto se dictaminó para no interferir en las labores de investigación de la Policía y para preservar la intimidad de los afectados por el siniestro. Entre las víctimas mortales figura una familia de cuatro personas: el padre, la madre y dos niños de corta edad, uno de ellos bebé de días.
Precisamente este juzgado finalizó ayer las autorizaciones que permiten a familias recoger los restos mortales de las víctimas del incendio. Ahora son los servicios funerarios los que deben acudir al Registro Civil para gestionar los certificados de defunción y pedir las licencias de enterramiento o incineración, tal y como han apuntado a Europa Press fuentes jurídicas.
El Registro Civil dará prioridad a los afectados para realizar este trámite y retirar los cuerpos de los familiares, cuyos funerales se empiezan a celebrar en la intimidad, mientras que el Ayuntamiento de València, respecto a la posibilidad de que se celebre un acto institucional en memoria y recuerdo de las víctimas, ha asegurado que, si lo hay, sería «a futuro» y «siempre» contando con el criterio y libertad de las familias de los fallecidos.
Ante el grueso de la causa, la Comisión de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) solicitará medidas de apoyo para el juzgado que instruye. Por su parte, la Conselleria de Justicia e Interior dotará al órgano judicial de más funcionarios y medios materiales para realizar la investigación de la forma más rápida y eficaz posible.
Julián, el conserje
La Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valenciana propuso ayer que el conserje del bloque de edificios arrasado por el fuego, Julián García, sea reconocido con los Premios Valores Humanos que anualmente concede la Policía Nacional por su actuación para avisar del suceso a los vecinos del inmueble, ayudar a su desalojo y de este modo contribuir a salvar vidas. El portero subió a las casas y fue llamando puerta a puerta hasta que el humo le impidió continuar.
Por otro lado, desde que se originara el incendio algunas comunidades de vecinos han solicitado las revisiones de sus edificios para determinar los materiales con los que han sido construidos y para revisar los seguros contratados.
Expertos han atribuido la rápida propagación del fuego del edificio de Campanar al material combustible de la fachada, a la ausencia de franjas de cortafuegos y al viento. La delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, ha subrayado que la Policía Científica está trabajando «rápido y bien» tanto en las identificaciones como en la línea de la investigación del foco del incendio, de las causas y los factores que lo provocaron.