Gestamp, multinacional especializada en el diseño, desarrollo y fabricación de componentes metálicos de alta ingeniería para la industria de la automoción, obtuvo un beneficio neto de 281 millones de euros en 2023, lo que supone un 8% más que el ejercicio precedente y cifra récord para la compañía.
Según ha informado la empresa, los ingresos durante el pasado ejercicio crecieron un 14,4% hasta alcanzar los 12.274 millones de euros, pese al entorno desfavorable de divisas. La compañía ha superado al mercado en 6,7 puntos porcentuales (a tipo de cambio constante y excluyendo el impacto de las materias primas), gracias a la «fuerte posición competitiva de Gestamp con sus clientes, la diferenciación de productos y el posicionamiento geográfico».
El EBITDA registrado entre enero y diciembre se ha situado en 1.371 millones de euros, lo que supone un incremento interanual de 13,4%, con una rentabilidad del 12,3% (excluyendo el impacto de las materias primas), a pesar de la presión en costes generalizada en todos los mercados y el impacto de divisas.
Respecto al EBIT reportado en el periodo, la cifra ha sido de 680 millones de euros, con un incremento con respecto al mismo periodo del año anterior de 25,9% y una rentabilidad del 6,1% (excluyendo el impacto de las materias primas).
Reforzando el perfil financiero
En línea con el compromiso adquirido a principios de año, a cierre de 2023 Gestamp ha generado 207 millones de euros de flujo de caja libre. Gracias a ello, la deuda de Gestamp se ha reducido hasta los 2.058 millones de euros, lo que supone un apalancamiento de 1,5x deuda neta sobre EBITDA, el menor ratio alcanzado por Gestamp desde su salida a bolsa.
De esta forma, se cumple el objetivo anunciado en el Capital Markets Day de 2023 y permite a la compañía encarar «con fortaleza la ambición por continuar creciendo en los próximos años», ha destacado.