Científicos de la Universidad de Granada (UGR) han demostrado la eficacia e idoneidad de la piel artificial 'UGRSKIN', un medicamento de terapias avanzadas diseñado por ellos en el año 2012 que ha mostrado una gran utilidad para el tratamiento del paciente gran quemado, sin generar ningún efecto secundario o complicaciones relevantes e integrándose rápidamente en el tejido del paciente.
El Grupo de Ingeniería Tisular del departamento de Histología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Granada y del Instituto de Investigación Biosanitaria ibs. Granada, que es pionero en el diseño y la fabricación de tejidos artificiales humanos, inventó y publicó en 2012 un modelo de piel artificial denominado 'UGRSKIN' basado en células de la piel humana y biomateriales naturales diseñados por el propio grupo de investigación.
El grupo logró demostrar la eficacia de este modelo de piel en animales de experimentación y logró desarrollar todos los controles de calidad necesarios para la caracterización de dicho modelo, según los requerimientos de las distintas agencias del medicamento.
Posteriormente, tras demostrar la utilidad potencial del modelo, el grupo de la UGR logró, en estrecha colaboración con la Red Andaluza de diseño y traslación de Terapias Avanzadas de la Junta de Andalucía, la fabricación de esta piel artificial en calidad farmacéutica para su uso como medicamento de terapias avanzadas de acuerdo con la normativa de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, cumpliendo todos los estándares de calidad existentes en Europa.
De este modo, y una vez aprobada por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, en 2016 se utilizó por primera vez la piel artificial 'UGRSKIN' para tratar a una paciente que presentaba graves quemaduras en el 70 por ciento de su superficie corporal en la Unidad de Quemados de referencia de Andalucía, localizada en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, con buenos resultados.
Desde entonces, se han tratado un total de 15 pacientes (ocho adultos y cuatro niños), con una supervivencia global cercana al 80 por ciento. En una rueda de prensa celebrada en la Facultad de Medicina de la UGR, donde se diseñó esta piel artificial, el equipo de investigación ha presentado el seguimiento y el análisis histológico de los 12 primeros pacientes tratados con este producto.
Ello ha dado lugar al artículo científico titulado 'Histological assessment of nanostructured fibrin-agarose skin substitutes grafted in burnt patients. A time-course study', publicado en la revista de alto impacto Bioengineering and Translational medicine.
«Una vez implantado, el modelo UGRSKIN se integró rápidamente en el tejido del paciente, mostrando una epidermis muy similar a la epidermis humana normal desde los primeros momentos que, por tanto, contribuye a la protección del paciente frente a posibles patógenos externos. Asimismo, la dermis del tejido implantado fue capaz de remodelarle progresivamente hasta hacerse histológicamente análoga a la dermis normal a partir del segundo mes de evolución del implante», ha destacado el profesor Miguel Alaminos.
Grandes quemados
El tratamiento de los pacientes grandes quemados supone un reto sanitario de primer orden. A pesar del desarrollo de la medicina actual, la supervivencia de los pacientes que sufren quemaduras profundas en amplias extensiones de su cuerpo es aún muy escasa, por lo que es necesario desarrollar nuevos tratamientos realmente eficaces para estos casos, como la piel artificial diseñada en la UGR.
Los resultados preliminares del proyecto que se ha presentado este viernes en la Universidad de Granada fueron comunicados en foros internacionales en Berlín, Zurich, Nantes y Shanghai. La próxima reunión de la Red Europea de Ingeniería Tisular de la Piel para grandes quemados (ESEN) se organizará en Granada en el mes de junio de 2024 por el grupo de investigación de Ingeniería Tisular como consecuencia de este logro.
Los pacientes tratados con esta piel artificial no sólo han logrado mejorar su calidad de vida, sino que, algunos de ellos, han logrado superar retos y dificultades tales como el ascenso a altas montañas y competiciones deportivas de elevado esfuerzo. No en vano, a la rueda de prensa, presidida por el rector de la UGR, Pedro Mercado, ha asistido Álvaro Trigo Puig, uno de los pacientes a los que se implantó la piel artificial en el año 2018.
Álvaro es un joven madrileño de 28 años que en 2018 sufrió quemaduras en el 63 por ciento de su piel tras un grave incendio. Debido a las heridas, estuvo en coma diez días y permaneció cuatro meses ingresado en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla.
Tras implantarse la piel artificial diseñada en la UGR, Álvaro Trigo ha organizado y llevado a cabo proyectos solidarios deportivos de larga distancia. Entre otros, ha escalado el Kilimanjaro y el Mont Blanc; cruzado a nado el Estrecho de Gibraltar y el trayecto entre Formentera e Ibiza o nadado desde las islas Cíes a Vigo con los pies encadenados.