El Lehendakari, Iñigo Urkullu, y el president de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonès, han compartido la necesidad de lograr la oficialidad del euskera y catalán en la instituciones de la UE y de que los PERTEs regionales sean gestionados por sus respectivas comunidades autónomas. Además, ha abordado el protocolo que ha presentado el Lehendakari a altas autoridades comunitarias para que se cree, dentro del Comité de las Regiones, una comisión de «nacionalidades constitucionales» para que estas tengan «voz y voto».
Urkullu, que se encuentra en su tercera y última jornada de viaje oficial en Bruselas, se ha reunido este miércoles por la mañana con el president de la Generalitat de Catalunya, antes de que ambos participen en el 'Caucus por al Autodeterminación', en el Parlamento Europeo, en el que también tomará la palabra el presidente de la Colectividad Corsa, Gilles Someoni.
En declaraciones posteriores a los medios de comunicación, el Lehendakari ha explicado que, en este primer encuentro celebrado con Aragonés, han compartido «la preocupación» por la gestión de los PERTEs regionales correspondientes principalmente a la industria, que, a juicio de ambos, debe corresponder a las comunidades autónomas.
«Hemos quedado en compartir también nuestras relaciones con los agentes sociales, económicos en cada una de las dos comunidades, en cada una de las dos nacionalidades históricas, y ver cómo podemos seguir adelante con esa reivindicación compartida», ha apuntado.
Otro de los temas que han abordado es la de los respectivos procesos transferenciales. En el caso de Euskadi, Iñigo Urkullu ha explicado a Pere Aragonés la relación que mantienen con el Gobierno de Pedro Sánchez, que tiene pendientes de transferir antes de concluir marzo, tres materias, entre ellas la de Ferrocarriles de Cercanías y la última fase de la política de inmigración referente a su acogida e integración social.
Por su parte, el Ejecutivo del Estado también se comprometió al traspaso de Rodalies a la Generalitat de Catalunya y la cesión de competencias en inmigración. Por ello, el Lehendakari y el President han intercambiado información sobre estas tranferencias.
Dar voz a las nacionalidades
En tercer lugar, han hablado de la entrega ayer por parte de Iñigo Urkullu a la vicepresidenta de la Comisión para la Democracia y Demografía, Dubravka Suiça, y a la Comisaria de Cohesión y Reformas, Elisa Ferreira, de un protocolo para garantizar que las Regiones con competencias legislativas y nacionalidades constitucionales participen en la toma de decisiones de la UE.
El documento plantea la creación de una comisión permanente de las regiones con capacidad legislativa y de las nacionalidades constitucionales, que cuenten con idioma propio, que puedan ser oficiales. Además, apuesta por la necesidad de «construir una Europa cercana a la ciudadanía dando legitimidad democrática y también con una gobernanza multinivel efectiva».
Urkullu ha destacado la importancia de que se constituya dentro de el Comité de las Regiones una comisión permanente en la que las nacionalidades constitucionales y las regiones con capacidad legislativa «tengan voz y voto». También ha resaltado la necesidad de la oficialidad en las lenguas propias de Cataluña y Euskadi, el catalán y el euskera, en las instituciones europeas.