La Conselleria de Educación propone destinar que el 40 por ciento de plazas de alumnado de Grado Superior de Formación Profesional (FP) estará destinado a alumnado procedente de Grado Medio con el fin de «garantizar una continuidad de estos estudios» y «dar así respuesta» a quienes quieran proseguir sus estudios.
Asimismo, se contempla que el 5% se reserve a plazas de inclusión, permitir la matrícula fuera del periodo ordinario a víctimas de violencia de género o la excepción en las pruebas de acceso a trabajadores que tengan reconocidos el 30% de las competencias profesionales objeto de estudio.
Así se ha expuesto en la Mesa Sectorial de Educación celebrada este jueves, en la que el departamento de Campanar ha trasladado a los sindicatos educativos las novedades para el curso 2024-25 en Formación Profesional (FP).
De esta manera, para acceder a los ciclos mediante acceso directo se tendrá en cuenta a aquellas solicitudes de alumnado que haya finalizado la etapa de estudios alegada en los tres últimos cursos académicos y se priorizará por nota y, en su caso, proceder de ciclos de la misma familia profesional.
Por otra parte, para acceder a los cursos de especialización de Formación Profesional, se requerirá estar en posesión de uno de los títulos de Técnico o Técnico Superior especificados en la normativa básica que establezca el curso de especialización correspondiente. Además, se podrá dar acceso a otras personas que no tengan dichos títulos, pero que cumplan determinados requisitos, para completar las plazas que no se cubran con titulados de FP.
Otra de las medidas que se ha trasladado en la mesa sectorial de FP ha sido la excepción en las pruebas de acceso a trabajadores y trabajadoras que tengan reconocido el 30% de las competencias profesionales objeto de estudio, quienes entrarán dentro del cupo de acceso por prueba aunque estarán exentos.
Desde la Conselleria de Educación han aprovechado para resaltar que la Formación Profesional en la Comunitat Valenciana está experimentando «un cambio de paradigma» y es «una opción cada vez más demandada para construir una carrera profesional de éxito» y con un «elevado grado de empleabilidad».
"apuesta decidida" por los ciclos formativos
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha planteado «una serie de mejoras», entre ellas «una apuesta decidida» por los ciclos formativos, con un aumento de grupos y un refuerzo, en general, de la oferta pública educativa.
El sindicato ha recalcado la importancia de un incremento de docentes y de recursos materiales en la formación profesional de la Comunitat Valenciana. En esa línea de impulsar la FP, aboga por medidas como un estudio por familias profesionales para elevar horas de desdobles o incrementar la seguridad jurídica para el personal docente en las instrucciones de inicio de curso.
CSIF ha solicitado, del mismo modo, más recursos de personal administrativo, y un protocolo específico y refuerzo del departamento de orientación con el fin de organizar la atención al alumnado con necesidades especiales.
El sindicato respalda las iniciativas anunciadas hoy por Conselleria, como que el 40% de plazas de alumnado de grado superior estará destinado a alumnado procedente de grado medio con el fin de garantizar una continuidad de estudios de FP.
CSIF también valora que el 5% se reserve a plazas de inclusión, permitir la matrícula fuera del periodo ordinario a víctimas de violencia de género o la excepción en las pruebas de acceso a trabajadores que tengan reconocidos el 30% de las competencias profesionales objeto de estudio. El sindicato cree que «van en la línea de reconocer la FP como una formación estratégica de la Comunidad Valenciana».
CSIF ha preguntado por el pago de la Seguridad Social en las prácticas, para que quede claro a quién corresponde, o la remuneración de los profesionales docentes que participan en pruebas de los ciclos.
La central sindical igualmente ha planteado, de cara a la configuración del próximo curso, un aumento de grupos en las familias con una demanda elevada con el fin de cubrir esas peticiones y evitar listas de espera que se alargan.
El sindicato hace hincapié en que la educación pública sea «lo más individualizada posible para atender a las singularidades y necesidades del alumnado». En este punto, apuesta por una rebaja de ratios y un aumento de desdobles, además de una dotación de los medios técnicos necesarios y actuales e incrementar la relación con las empresas.