Un juzgado de Tarragona está investigando a la condenada por el 'crimen de la Guardia Urbana', Rosa Peral, y a su padre por presunta ocultación de bienes, después de transferirle la casa y el coche a su progenitor poco antes de ser condenada por el asesinato de su pareja, según ha podido saber Europa Press.
La jueza ha citado a padre e hija a declarar este 24 de enero porque Peral supuestamente habría cedido su casa a su padre pocos días antes de que el Tribunal Supremo la condenara en firme a 25 años de cárcel por el asesinato de su pareja, un agente de la Guardia Urbana, según ha avanzado 'La Vanguardia'.
Se ha aceptado la querella presentada por los familiares de la víctima al considerar que puede haber indicios de delito de alzamiento de bienes, «al haber donado a su padre la casa de Vilanova i la Geltrú (Barcelona) de la que era propietaria para así no tener que indemnizar a los familiares de la víctima».
La sentencia que condenó a Peral y a su amante, Albert López --también agente de la Guardia Urbana-- por el asesinato, a 25 y 20 años, respectivamente, fijó que ambos debían pagar conjuntamente 885.000 euros a los familiares de la víctima, y que, en caso de no tener el dinero, les embargarían sus propiedades.
La condenada citó a un notario en prisión y trasfirió su casa y su coche a su progenitor, por lo que pasó a ser «insolvente» y se libró de abonar la indemnización.