PSPV y Compromís cargan contra el 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, por su negativa a modificar los presupuestos autonómicos para 2024 tras confirmar el Ministerio de Hacienda que las transferencias del Estado serán menores de las presupuestadas, lo que a su juicio demuestra que eran «ingresos fantasma». Por contra, el PP defiende que son unas cuentas «magníficas».
Así se han pronunciado representantes de los tres grupos en Les Corts después de que Mazón se negara este martes a cambiar los presupuestos porque, según dijo, ni quiere ni puede hacerlo.
Desde el PSPV, su portavoz de Hacienda, José Muñoz, ha acusado a Mazón de mentir cuando dijo que no había un objetivo de déficit fijado por el Gobierno cuando se elaboraron los presupuestos, ya que ha asegurado que estaba establecido en el 0,1%.
Le ha exigido «responsabilidad, prudencia y, sobre todo, defensa de los intereses valencianos», ya que ha advertido que los presupuestos esconden «recortes en el conjunto de la ciudadanía».
Además, el diputado socialista ha afeado al también líder del PPCV que hiciera estas declaraciones en una cumbre en Madrid junto a la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso en defensa de la ampliación del puerto de València.
"no somos una colonia de madrid"
«Nosotros no somos una colonia de nadie ni el puerto de nadie», ha recalcado, y se ha preguntado si los primeros presupuestos de Mazón esconden el modelo de Ayuso de «desmantelamiento del Estado del Bienestar».
Por Compromís, el diputado Jesús Pla ha coincidido en que los presupuestos demuestran «falta de rigurosidad» en su elaboración, al basarse en «premisas no verdaderas y descuadradas» con «partidas de ingresos que no se van a recibir». «No van a cuadrar de ninguna manera», ha augurado.
Frente a estas críticas, el síndic del PP en Les Corts, Miguel Barrachina, ha defendido la contundencia de Mazón al negarse a cambiar los presupuestos, que ha reiterado que no incluyen «1.300 millones de euros ficticios» y son «serios».
También ha rechazado la «decisión política, arbitraria y caprichosa» del Gobierno de ceder un 0,1% del objetivo de déficit a las autonomías dentro del 3% que propone Bruselas para España. Y ha denunciado que la ministra Mª Jesús Montero no contestó a la consellera Ruth Merino sobre el objetivo de déficit «hasta tres meses después».