El vicesecretario de Política Autonómica y Municipal y Análisis Electoral del PP y exconsejero andaluz, Elías Bendodo, y el actual presidente del Consejo Económico y Social (CES) de Andalucía y exvicepresidente de la Junta, Juan Marín, han reivindicado este viernes el Gobierno de coalición entre PP-A y Ciudadanos (CS) que se conformó en la comunidad tras las elecciones autonómicas del 2 de diciembre de 2018, de las que mañana sábado se cumple el quinto aniversario.
Durante su participación en los encuentros informativos de Europa Press Andalucía en colaboración con la Fundación Cajasol, en Sevilla, ambos han intercambiado opiniones e impresiones sobre ese Gobierno de coalición que PP-A y CS conformaron en la comunidad (con apoyo externo de Vox) y que supuso desalojar al PSOE-A de la Junta tras casi cuatro décadas.
Bendodo ha manifestado que mañana se cumplen cinco años de algo que «parecía imposible», que se podía conformar una mayoría que desalojaría al PSOE-A de la Junta: Un pacto de gobierno entre PP-A y CS, que tendría el apoyo parlamentario de Vox. Ha indicado que cinco años después y ya con un Gobierno autonómico de mayoría absoluta del PP, el balance arroja que se ha conseguido que los «andaluces vuelvan a sentirse orgullosos de ser andaluces» y que esta tierra sea una «locomotora del país y no vagón de cola».
Ha recalcado que han sido cinco años positivos para Andalucía, que hoy está «claramente mejor» que en 2018, último año de un gobierno del PSOE-A.
Para Bendodo, ese gobierno de coalición entre PP-A y CS fue fruto de una verdadera «política de altura», no de esa «política de altura» de la que ahora habla el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que consiste en «comprar siete votos al precio que sea».
Las reuniones entre PP-A y CS para tomar decisiones sobre la hoja de ruta para la comunidad, según ha añadido, se hacían «con luz y taquígrafos», cada semana, en el seno del comité de enlace para mantener la estabilidad del Gobierno. «Ahora la moda es reunirse fuera de España en un cuarto oscuro», ha dicho Bendodo en referencia a las reuniones de PSOE con Junts en Ginebra, con la presencia de un mediador.
«Se hizo de la necesidad virtud; Andalucía necesitaba el cambio, y todos pusimos lo mejor de nosotros mismos por el cambio», ha indicado el dirigente popular sobre el pacto que PP-A y CS lograron hace cinco años. Como reflexión, Bendodo ha indicado que «los gobiernos de coalición, si funcionan, son mejores que los de mayoría absoluta».
Por su parte, Juan Marín, que ya no pertenece a CS, ha expresado que ese pacto se pudo forjar y durar hasta el final por «había confianza y lealtad» entre las partes. En cuanto a los resultados para Andalucía cinco años después, ha señalado que los datos son «objetivos»: crecimiento económico por encima de la media, bajada de la tasa de paro y líder en creación de autónomos.
Ha recalcado que se siente «muy orgulloso de haber participado en ese Gobierno de coalición» y ha señalado que recuerda con «nostalgia» ese 2 de diciembre de 2018, aunque ya desde una perspectiva «mucho más tranquila y relajada». «Hicimos un buen trabajo», ha apuntado el exvicepresidente de la Junta, recalcando que había «lealtad con un proyecto que no es otro que Andalucía».
Tras indicar que fue más difícil negociar con todos los partidos la Mesa del Parlamento tras el 2D que el desarrollo de la legislatura en sí, ha indicado que en el Gobierno de coalición «hubo lealtad por encima de todo, compromiso y había una hoja de ruta con la que había que cumplir». Ha desvelado que Bendodo, con el que mantiene una gran amistas desde entonces, le «cuidaba» más que los suyos, en referencia a CS.
Asimismo, ha indicado que PP-A y CS no necesitaban ningún «verificador» porque
lo que firmamos, lo evaluábamos, «nos sentábamos todas las semanas y las cosas se cumplían».
Sobre la situación en la política nacional, ha criticado, en referencia a Pedro Sánchez, que haya gente que «se amarra a un sillón a cualquier precio» y no se puede entender que una persona «huida de la justicia en España es la que manda» en este país, en alusión al dirigente de Junts, Carles Puigdemont.
Ha señalado que hay una división importante en España entre ciudadanos que piensan que la amnistía es «un atropello a sus derechos» y los que intentan «justificarla con la boca pequeña».