El Departamento de Seguridad del Gobierno vasco ha asegurado que sí informó el pasado lunes al Juzgado de guardia de Bilbao, a través de una comunicación, del robo de un arma particular a un ertzaina por parte de un joven de 19 años, supuesto agresor de su expareja.
En un comunicado, la Consejería que dirige Josu Erkoreka ha ofrecido esta aclaración después de que ayer el juez decano de Bilbao, Aner Uriarte, negara que la Ertzaintza hubiera presentado ante el Juzgado de guardia el atestado por los hechos relativos al robo del arma en el domicilio de un agente de la Policía vasca de la localidad vizcaína de Barakaldo el pasado 18 de noviembre.
La pistola se encontraba dentro de una mochila del ertzaina, que fue sustraída supuestamente por este joven. Posteriormente, se encontró la bolsa, pero no el arma, que sigue sin aparecer. La alarma se despertó, sobre todo, al conocerse que el presunto autor del robo estaba acusado de ejercer violencia de género contra su expareja, a la que se puso vigilancia permanente, a la espera que la autoridad judicial le impusiera medidas cautelares.
El pasado lunes, después de estar en paradero desconocido, el presunto autor del robo de la pistola se entregó en comisaría, y fue trasladado ante el juez, que le comunicó las medidas cautelares que había decretado para proteger a la víctima, y le pusó en libertad.
Tras las críticas sindicales a la puesta en libertad, desde el Juzgado de guardia se aclaró que esta persona, a la que «supuestamente se le imputa el robo de una pistola», no había comparecido con un atestado de la Policía vasca por unos hechos relacionados con la sustracción del arma, sino por «una requisitoria» que tenía de otro órgano judicial en relación con el cumplimiento de una pena anterior que «nada tiene que ver» con ese caso.
El juez decano de Bilbao posteriormente, en un comunicado, precisó que la Ertzaintza «únicamente» presentó en el Juzgado un atestado por una orden de detención emitida previamente por el Juzgado de lo Penal número 7 de Bilbao, para la citación judicial a dicha persona.
«El Juez de Guardia se limitó a realizar la citación, y, tras ello, acordó la puesta en libertad del detenido. La Ertzaintza no presentó ante el Juzgado de guardia atestado con detenido por los hechos relativos al robo del arma», insistió.
La comunicación al juez
El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, ha hecho público un breve comunicado en el que asegura que estos hechos fueron comunicados al juez y, para corroborarlo, adjunta el escrito que se le remitió desde la comisaría, en el que se pedía la adopción de medidas cautelares por el caso de violencia machista del detenido contra su expareja, poniendo en su conocimiento el robo de la pistola del agente, lo que había llevado a la Ertzaintza a «elevar al máximo del nivel de riesgo y de protección a la víctima».
Según ha precisdo, esta comunicación se envió al juzgado por el sistema de intercambio de información digital (Avantius) a las 12.24 horas del 20 de noviembre, horas antes de que el joven se entregara de forma voluntaria en las instalaciones policiales.
El escrito facilitado por la Consejería de Seguridad, en la que se piden medidas cautelares para proteger a la víctima, relata que, sobre las 11.55 horas del pasado día 18, se tuvo conocimiento del robo con fuerza de un arma corta en el domicilio de un agente de la Ertzaintza en Barakaldo.
Tras identificar al supuesto autor de los hechos, con la ratificación de un testigo, al que se le mostraron fotografías, se intentó su localización sin éxito. Por ello, en la comunicación al Juzgado, alerta del nivel de riesgo «especial» de la expareja de esta persona, a la que se había puesto, «vigilancia permanente», con su acuerdo.