El Bosque de los Zaragozanos inicia su tercera temporada de plantaciones este sábado con el objetivo de sumar 75 nuevas hectáreas y de mejorar su difusión y comunicación entre el público más joven, con un cambio de imagen incluido.
Empresas y ciudadanos inauguran la ventana de plantaciones, que se extenderá durante el mes de noviembre para finalizar en diciembre, de manera que se aproveche la llegada del frío. En esta nueva edición del Bosque de los Zaragozanos, las actuaciones de otoño e invierno se llevarán a cabo en 22 hectáreas de las zonas de Peñaflor y La Plana, a las que se sumará, ya en primavera, el campo de maniobras de San Gregorio, con 52 hectáreas, donde ya se ha tramitado la solicitud ambiental.
Asimismo, en el entorno urbano se regenerarán parcelas para crear islas verdes y dar continuidad a la infraestructura verde. En concreto, en el Andador Publio Cordón se renaturalizarán 1,8 hectáreas; mientras que en Campos del Canal se plantarán más de 8.000 nuevos arbustos. En esta zona, una de las novedades es la diversificación de especies, que conllevará la introducción de plantas con fruto que sirvan de alimento para la fauna silvestre, contribuyendo a mejorar la biodiversidad.
La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha indicado que el Bosque de los Zaragozanos es uno de los más importantes de la ciudad porque dejará «un gran legado», así como por el respaldo obtenido por parte de más de 200 empresas, más de 8.000 ciudadanos y otros tantos centros educativos.
Ha recordado que el «ambicioso» objetivo del Bosque de los Zaragozanos es dotar a la capital aragonesa de 700.000 árboles en los próximos diez años, «uno por cada ciudadano». Las dos campañas de plantación anteriores suman 135.000 ejemplares en más de 120 hectáreas.
«Nunca antes, Zaragoza había impulsado con tanta fuerza y determinación el reverdecimiento de la ciudad, que contribuirá a mejorar la salud de los vecinos y la calidad del aire, a crear nuevos espacios de esparcimiento para pasear y hacer deporte», ha apuntado Chueca, añadiendo que también es un proyecto «redondo», vinculado a la economía circular, porque se aprovechan residuos orgánicos.
Por otro lado, en diciembre, se retomarán las actividades con escolares y más de 1.500 alumnos de 5º y 6º de Primaria participarán en el programa educativo del Bosque de los Zaragozanos que, además de las plantaciones, incluye sesiones formativas con educadores ambientales, materiales didácticos y talleres sobre el terreno.
Novedades tercera campaña
Chueca ha detallado que la principal novedad de la tercera edición del Bosque de los Zaragozanos es alcanzar la cifra de 75.000 nuevos ejemplares plantados, que se sumarán a los 135.000 de anteriores campañas.
Ha anunciado que, en paralelo, se está trabajando con el Gobierno de Aragón para acceder a nuevas parcelas y ampliar los espacios verdes alrededor de la ciudad; y con la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), que se sumarán al proyecto y así se logrará una mayor participación, no solo de ciudadanos, escolares y empresas, sino de instituciones más allá del Ministerio de Defensa, que cedió 500 hectáreas para plantaciones.
La mejora de la comunicación y difusión del proyecto es otro propósito para este año. «Hemos entrado en una dinámica en la que no es tan novedoso como la primera campaña, por eso, necesitamos seguir captando la atención de los ciudadanos», ha comentado.
Por este motivo, «hemos querido darle un impulso con una nueva imagen de marca del Bosque de los Zaragozanos», que intenta transmitir «un toque de realismo e implicación», a la vez que «mejora la legibilidad» del proyecto.
LLAMADA A LA ACCIÓN
Natalia Chueca se ha referido a la necesidad de «llegar» al público joven, a pesar de que es el que está más concienciado con la importancia de que Zaragoza sea una ciudad climáticamente neutra. «Nos falta llamarles a la acción para que apadrinen un árbol, se sumen a la campaña y disfruten de las jornada de plantación», ha añadido.
La nueva campaña de comunicación, que incluye un vídeo, se difundirá a través de redes sociales, y juega con el humor y el sentimiento de pertenencia «con un toque muy actual», ha opinado Chueca. Está protagonizada por cuatro conocidos creadores de contenido de la capital aragonesa.
Igualmente, el Bosque de los Zaragozanos saldrá a la calle esta Navidad con una caseta que se instalará en la plaza Aragón para que la ciudadanía pueda apadrinar árboles, colaborar en la renaturalización y mejora de la biodiversidad de la ciudad.
Proyecto de continuidad
Por su parte, el presidente de ECODES, José Ángel Ruperez, ha remarcado que el Bosque de los Zaragozanos es «un proyecto de ciudad» que estará en marcha hasta 2030, por lo que tiene que haber una «mentalidad de maratón, de continuidad» y exige que se involucre y participe toda la ciudadanía y entidades.
También es un proyecto «de legado» para la ciudad, ha observado Ruperez, quien después ha destacado la importancia de la iniciativa porque los árboles «cada día son más necesarios» para dar sombra, en un contexto de progresivo incremento de las temperaturas, y humidificar el entorno en el que están, lo que reduce las islas de calor de las ciudades.
Ha manifestado que la plantación de esta campaña será «algo más corta» debido, precisamente, a ese aumento de las temperaturas, que ha obligado, a su vez, a iniciar las plantaciones más tarde de lo deseado.
Ruperez ha subrayado que, del mismo modo, el Bosque de los Zaragozanos pretende mejorar la salud de los vecinos, a través de las absorciones de dióxido de carbono que los árboles, a lo largo de su vida, generan para crecer ellos. En definitiva, esta iniciativa municipal, que cuenta con la colaboración de ECODES, está alineada con el reto de que la capital aragonesa se convierta en «ejemplar» por su neutralidad climática.
Por último, el presidente de ECODES ha celebrado que la mayoría de las compañías que han formado parte anteriormente del Bosque de los Zaragozanos continuarán haciéndolo este año y ha animado a incorporarse al proyecto a todo aquel que no lo esté, ya que «plantar árboles nos da alegría y vida».