Los Mossos d'Esquadra detuvieron el 2 de noviembre en Reus (Tarragona) a 11 personas --siete hombres y cuatro mujeres-- por sustraer documentación de las víctimas y comprar móviles con financiación a su nombre.
En un comunicado este martes, han explicado que la investigación se inició en octubre de 2022, cuando la policía catalana detuvo a un hombre por su presunta participación en diferentes ilícitos penales relacionados con la sustracción de documentación y la posterior compra financiada de teléfonos móviles de alta gama a nombre de terceros.
El 'modus operadi' de este presunto grupo criminal era adquirir la documentación de las víctimas mediante robos en el interior de vehículos, usurpar su identidad y comprar teléfonos móviles y otros productos electrónicos mediante un financiación a nombre de la víctima.
Con este método habían estafado a más de 100 personas, causando un «perjuicio económico total aproximado de unos 160.000 euros», la mayoría eran residentes en el Camp de Tarragona.
Investigación paralela
Meses antes, la Guardia Civil también inició una investigación sobre esta presunta organización criminal, en la que también estaba implicado el hombre detenido por los Mossos d'Esquadra.
Este verano, los cuerpos policiales se coordinaron y el 2 de noviembre realizaron siete entradas y registros en domicilios de Tarragona, Reus, La Riba y El Vendrell (Tarragona), y detuvieron a 11 personas y cuatro más quedaron como investigadas, aunque el caso sigue abierto y no se descartan más detenciones.