El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid celebrado esta semana ha autorizado una inversión de 81,2 millones de euros para el mantenimiento de 143 trenes de la serie 3000 y 9000, que representan un tercio de todo el material móvil que la compañía pública tiene en circulación en la red del suburbano.
Este contrato, que tiene una duración de cuatro años a contar desde su aprobación, contempla diferentes trabajos específicos entre los que se incluyen, la reparación de las averías imprevistas durante la prestación del servicio, las revisiones programadas y el recambio de materiales que se desgastan o consumen por la actividad diaria.
Metro de Madrid cuenta con 90 trenes de la serie 3000, que prestan servicio en las Líneas 2, 3 y el Ramal de Ópera-Príncipe Pío y 53 de la serie 9000, que circulan por las Líneas 7, 9, 10 y 12 (Metro Sur).
El conjunto de estas líneas absorbió el pasado año casi la mitad del total de viajeros de la red, un 48% al sumar 275 millones de personas, según los datos ofrecido por la Administración autonómica.
La finalidad de esta actuación, subraya la Comunidad, es mantener la flota «en perfecto estado de operatividad», evitar incidencias y garantizar «su fiabilidad y la seguridad en la circulación», lo que redunda en «una mayor calidad del servicio y comodidad de los usuarios».