El olmo siberiano que ayer mató a una joven de 23 años en la calle Almagro era un «árbol sano» revisado dos veces por el Ayuntamiento de Madrid entre los años 2022 y 2023 por su gran porte, ha confirmado el área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad en un comunicado.
El árbol, de quince metros de altura y un perímetro de 188 centímetros, se vino abajo ayer por las fuertes rachas de viento, registradas dentro del aviso amarillo de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y que pudieron superar los 80 km/h en el área metropolitana.
En los últimos dos años, el Servicio de Evaluación y Revisión Verde (Server) había revisado este ejemplar en dos ocasiones debido a su gran porte, concretamente el 25 mayo de 2023 y el 28 de mayo de 2022. «Era un árbol sano y en ninguna de las dos inspecciones se detectó ningún defecto», han confirmado desde el Ayuntamiento.
El Server constató ayer tras producirse el suceso que el ejemplar desplomado no sufría ninguna patología ni daño previo al vuelco. Este servicio municipal se puso en marcha en septiembre de 2018 y realiza desde entonces un programa de inspecciones periódicas y programadas para los 21 distritos. Los ejemplares a inspeccionar son los de edad madura y vieja. En la actualidad, el Server controla 350.000 ejemplares. El árbol caído estaba incluido en esta cifra.