Vox ha entrado a formar parte del equipo de gobierno de la ciudad de València, presidido por la alcaldesa María José Catalá e integrado hasta ahora solo por el PP, con tres áreas del consistorio y diez delegaciones.
Entres estas competencias figuran Empleo, Emprendimiento y Formación, Parques y Jardines, Devesa-Albufera, Playas, Agricultura, Familia, Juventud, Infancia, Mayores, Sanidad y Consumo y Tradiciones, que incluye fiestas pero sin Fallas. Estas últimas siguen en manos del PP. Además, el portavoz de Vox en el Ayuntamiento, Juanma Badenas, pasa a ser segundo teniente de alcalde.
Así lo ha anunciado este viernes la primera edil en una comparecencia ante los medios de comunicación convocada esta misma jornada para dar a conocer el pacto, sobre el que se había especulado desde el inicio del nuevo mandato tras las elecciones municipales, especialmente en las últimas semanas a raíz de la reciente aprobación de las ordenanzas fiscales con los votos de 'populares' y Vox previas a los presupuestos.
Catalá ha estado acompañada por todos los ediles del PP y de Vox, encabezados estos últimos por su portavoz.
«Acabo de firmar una serie de resoluciones» para la «modificación del gobierno del Ayuntamiento de València para esta legislatura», una «remodelación fruto del acuerdo» con «el grupo Vox, que entra a formar parte del gobierno municipal con una serie de competencias», ha dicho la alcaldesa.
María José Catalá ha gobernado en solitario, con 13 de los 33 ediles de la corporación local y por tanto en minoría, desde la conformación del ejecutivo local tras las elecciones municipales del pasado mes de mayo.
La primera edil ha aseverado que el acuerdo de gobierno cerrado con Vox, al que no se le ha dado ningún nombre concreto, se ha hecho «sobre un reparto proporcional a los resultados electorales» de esos comicios, en los que Vox logró 4 concejales en la capital valenciana. Esa distribución contempla que 11 áreas municipales dependan del PP y tres de Vox.
Catalá ha añadido que las áreas del PP «no sufren excesivos cambios», pensando en la «estabilidad» y en una «estructura operativa». La responsable municipal ha asegurado estar «muy satisfechos por el acuerdo para dar a València la estabilidad que precisa» y afrontare los «grandes retos que tiene por delante».