La Comunidad de Madrid ha comenzado a redactar una nueva Ley del Suelo que facilite «el desarrollo económico y urbanístico de los municipios e incentive, así, la disposición de suelo que mitigue el déficit estructural de viviendas que sufre la región», ha anunciado el consejero de Medio Ambiente, Interior y Agricultura, Carlos Novillo, en un encuentro informativo.
El texto contemplará la simplificación de procesos y plazos, así como la flexibilización en la calificación de usos, lo que permitirá dotar de mayor agilidad el proceso de planeamiento y construcción de suelos. «Se busca conseguir un urbanismo con mayor autonomía municipal, donde la ordenación detallada sea propia del municipio debiendo en todo caso encajarse con la ordenación del territorio», ha apuntado Novillo.
Por su parte, el viceconsejero de Medio Ambiente, Agricultura y Ordenación del Territorio Rafael García González, ha explicado que la flexibilización de los usos del suelo quiere que sean «más generales y menos concretos» para que los ayuntamientos puedan cambiarlos sin necesidad de tener que aprobar un nuevo Plan de Ordenación.
Objetivo: mayor agilidad
«Se trata de una ley que busca una mayor agilidad para que ese suelo se ponga a disposición tanto de nuestra Consejería como del sector privado. Necesitamos poner suelo en oferta ante la escasez de vivienda para que se construya más. También hay que poner suelo para las energías renovables. Y para ello necesitamos instrumentos que agilicen», ha dicho.
El viceconsejero espera que a mediados de 2024 tenga ya borrador de la nueva Ley del Suelo y se apruebe en la Asamblea a finales de ese año. Y ha recordado que dicha normativa ha sufrido 28 modificaciones en los últimos años, la última y muy importante con la Ley Ómnibus, por lo que quieren la que nueva Ley «refunda» todos esas modificaciones aprobadas a lo largo de los años.
Preguntado por los periodistas Carlos Novillo por si esta nueva ley incluiría algo sobre zonas tensionadas, ha respondido que no porque Ley de vivienda estatal «es una ley intervencionista, que reduce la oferta, que está en contra de la iniciativa privada constructiva, que va en contra de la oferta y favorece la subida de los precios de los alquileres».