El periodista Jordi Évole ha criticado el «ruido» originado por el estreno del documental 'No me llame Ternera' en el Festival San Sebastián, en el que recoge el testimonio del exmiembro de ETA Josu Ternera, sobre el que afirma estar «decepcionado» por su lenguaje poco «conciliador». «Hablaba más para dentro que para fuera, más para los presos de ETA, para la militancia, y eso anula la posibilidad de un discurso conciliador», ha
Évole ha ofrecido este sábado en el Kursaal una rueda de prensa, junto al codirector del documental Màrius Sánchez, en la que ha lamentado que «en un festival en el que se presentan películas de gente como Fernando Trueba, J.A. Bayona o Isabel Coixet» haya hecho tanto «ruido» su documental, que abre este sábado la sección Made in Spain. «No era nuestra intención llegar con tanta expectación y que la cosa haya crecido como lo ha hecho», ha afirmado.
En esa línea, ha confesado que sabía que era un tema «espinoso» porque, «lo cojas por donde lo cojas, en este asunto siempre te pinchas». «Hubiésemos preferido que se dijeran las cosas después de la película. Los que hicieron el comunicado en contra del documental han marcado por dónde irían los comentarios de la película. Nos hubiese gustado un visionado previo», ha indicado
Al respecto, Sánchez ha asegurado que no esperaban la carta que firmaban 514 personas entre las que se encontraban víctimas de ETA, periodistas e intelectuales y, según ha insistido, «no estábamos preparados para un ruido como el que ha habido». No obstante, ambos han manifestado estar «muy tranquilos y satisfechos» con el resultado del documental porque, en su opinión, el «interés periodístico de la entrevista es indiscutible».
Por otro lado, ha defendido la importancia de este testimonio en un momento en el que «no hace tanto tiempo que ETA dejó de matar». «Hoy se ven encuestas que muestran que jóvenes de 20-25 años no saben quién fue Miguel Ángel Blanco. Es una anomalía de este país que no sabe mirar a su pasado sin miedo, aunque duela. La historia duele pero tenemos que decidir si queremos estar en la parte que canta 'Que te vote Txapote' o en la parte de conocer quién era Txapote. Yo sé donde quiero estar», ha asegurado
Ambos directores han revelado que la entrevista duró un total de nueve horas, lo que les ha llevado a estar un año editando el resultado final. En ese sentido, Jordi Évole ha asegurado que han querido «tratar a los espectadores como se merecen, como una ciudadanía formada e informada que no necesita que nadie le diga lo que tiene o no tiene que ver. Ofrecemos a nuestra audiencia un material que puede ser complejo, pero confiamos plenamente en ella», ha remarcado.
Preguntado acerca de su opinión de Josu Ternera, el periodista ha afirmado que se trata de un «militante que pone la organización por encima de todo». «A nosotros, en cuanto al contenido de la entrevista, nos decepcionó Josu Ternera en el sentido de que hubiésemos querido un lenguaje más conciliador. Nos hubiese gustado que hubiese palabras más amables», ha admitido.
A su juicio, «hablaba mucho más para adentro que para afuera y hablaba mucho más para los presos que siguen en la cárcel cumpliendo condenas, y eso casi que anula la posibilidad de que haya un discurso más conciliador». «Supongo que no quería tampoco hacer una enmienda a la totalidad», ha expresado Évole, quien ha apostillado que en la izquierda abertzale hay «una cierta cobardía a la hora de decir todo lo que se piensa».
Además, el periodista ha indicado que el exdirigente de ETA no puso ninguna condición para hacer la entrevista. «Si lo hubiese hecho, no habríamos accedido a entrevistarle», ha subrayado. En el documental, también aparece Francisco Ruiz Sánchez, víctima de un atentado, y como ha comentado Màrius Sánchez, consideran que era de «justicia» contar con su presencia. «Es una persona que ha vivido en primera persona un asesinato», ha recordado.
Uno de los momentos en los que las palabras de Josu Ternera sorprendieron a Évole fue en las que mencionan el asesinato de María Dolores González 'Yoyes'. «Pensaba que podía haber cierto arrepentimiento, pero no fue así. Dijo que su asesinato era una decisión de la organización que tenían un problema con las personas que querían reinsertarse de nuevo. Después de esa respuesta, vi claro que no habría muchos movimientos de opinión como hemos visto en otras ocasiones», ha destacado.
Interés periodístico "indiscutible"
Durante la rueda de prensa, el informador catalán ha reivindicado que hay que saber mirar al pasado con «valentía». «Esto es una anomalía de este país. Un estado debe mirar a su pasado con valentía y sin miedo. La historia de todos los países duele, y la nuestra también», ha sostenido.
En este sentido, el periodista ha seguido defendiendo el valor de entrevistar a Josu Ternera y ha puntualizado que «es importante conocer el punto de vista por horroroso que pueda ser». «También había detrás una voluntad histórica. Cuando de aquí a unos años haya quien quiera saber cómo razonaba ETA, cómo razonaba un líder de ETA, habrá un sitio en el que poder ver cómo se producían los atentados o cada una de las peticiones y poder poner la historia en su sitio», ha asegurado.
Por otro lado, se ha referido al comunicado de 514 personas, entre otros víctimas del terrorismo, políticos, o escritores como Mari Mar Blanco, Ana Iribar, Carmelo Barrio, Fernando Savater o Fernando Aramburu. «Evidentemente esperábamos un cierto ruido pero no tanto, y tampoco esperábamos una petición de lo que podría llamarse censura preventiva», ha confesado.
En relación a los que le han acusado de «blanquear» el terrorismo, Évole ha respondido que se «equivocan» por usar ese término porque «entrevistar no es blanquear y preguntar tampoco es blanquear». «Si han llegado a esa conclusión es porque nos conocen poco», ha añadido.
Por último, el periodista apela a que no se hable de las víctimas como un colectivo «homogéneo» porque «no son una masa única y abstracta». «Yo he hablado con víctimas que tienen un discurso conciliador que admiro. Hay personas concretas, y os puedo garantizar que han sido muchas, que se han acercado a nosotros para decirnos que está muy bien lo que hemos hecho», ha concluido.