Si bien la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla tiene fijado para el día 25 de este mes el comienzo de un juicio sobre otra de las piezas separadas de la macrocausa relativa a las irregularidades de la empresa de capital de riesgo Invercaria, adscrita a la Agencia de Innovación y Desarrollo (IDEA) de la Junta de Andalucía, la defensa del principal inculpado en esta y el resto de causas, el expresidente de Invercaria Tomás Pérez-Sauquillo, ha interesado la suspensión de la vista, de nuevo a cuenta de su estado de salud, según han informado a Europa Press fuentes del caso.
En este caso, el nuevo juicio está destinado a abordar los fondos públicos concedidos por Invercaria a la empresa Servivation, afincada en el Parque Tecnológico de Málaga (PTA), con un calendario previsto que se prolongaría al menos hasta el 31 de octubre.
Empero, la representación del expresidente de Invercaria, principal acusado en cada una de las piezas juzgadas en torno a esta macro causa, ha solicitado suspender el juicio por la situación que afronta Pérez Sauquillo en materia de salud.
Ello, después de que el pasado mes de mayo, la Sección Cuarta de la Audiencia de Sevilla suspendiese finalmente el juicio que tenía previsto iniciar entonces sobre los préstamos participativos concedidos por Invercaria a la empresa de Mancha Real (Jaén) Electronics Devices Manufacture (EDM), por valor de 1,18 millones de euros.
"imposible" asistir al juicio
Más al detalle, al comienzo de la sesión, la defensa de Tomás Pérez-Sauquillo solicitaba la suspensión de la vista, porque a su patrocinado le resultaba «imposible» asistir dado su ingreso en un centro hospitalario por dolencias relacionadas con el corazón y la próstata, por las cuales había sido intervenido quirúrgicamente; aportando además documentación médica en ese sentido.
Ninguna de las partes se opuso a dicha petición, tras lo cual la presidenta del tribunal declaraba la suspensión del juicio, para el cual había programadas numerosas jornadas, «a la vista de la documentación médica que acredita la imposibilidad de asistencia» de este acusado, «por razones evidentes» y cuando «se desconoce cuál será su evolución» sanitaria.
El nuevo señalamiento del juicio, según especificaba la presidenta del tribunal, quedaba así pendiente de la evolución de la «situación médica» de Pérez-Sauquillo.
La situación de pérez-sauquillo
Pérez-Sauquillo, recordémoslo, está condenado a tres años y medio de prisión por prevaricación en concurso con malversación por un préstamo arbitrario de 100.000 euros a la empresa Aceitunas Tatis, extremo ratificado por el Supremo; y ha sido condenado además a dos años y tres meses de prisión por los gastos propios de personal de Invercaria, a tres años de cárcel por el préstamo participativo de 300.000 euros concedido a la empresa jiennense Fumapa y a la misma pena por las ayudas por 1,5 millones de euros concedidas por Invercaria a la sociedad Cedes Electria.
Empero, su condena por el préstamo a la empresa Tatis ha sido la primera y de momento única en ser ratificada por el Supremo, extremo ante el cual la Sección Primera de la Audiencia de Sevilla determinó su «inmediato ingreso voluntario en prisión»; ante lo cual su defensa alegaba la grave enfermedad que padece, lo que a su vez llevaba a la Fiscalía a solicitar un informe médico forense y que los servicios médicos penitenciarios determinasen si el inculpado «puede o no conllevar su enfermedad» en la cárcel, pesando posteriormente su ingreso hospitalario.