El consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, acompañado por la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, ha presidido este miércoles la reunión constituyente de Cyberzaintza, la nueva Agencia Vasca de Ciberseguridad, destinada a combatir las amenazas derivadas del uso de internet y las nuevas tecnologías en Euskadi.
El Consejo de Administración de este organismo se ha reunido por primera vez para dar inicio a la actividad de la agencia, que se ubicará en el Parque Tecnológico de Araba (Miñano), en la sede del actual Basque Cybersecurity Centre, que próximamente cederá su personal e instalaciones a la nueva estructura.
Una de las primeras tareas de este Consejo de Administración ha sido dar el visto bueno a los estatutos que establecen las bases legales y operativas de Cyberzaintza, delineando sus objetivos, funciones y estructura, que próximamente se elevarán a Consejo de Gobierno para su aprobación, según ha informado el Gobierno Vasco en un comunicado.
Funciones
La nueva agencia trabajará, principalmente, en tres ámbitos. Uno de ellos es la ciberdelincuencia, a la que hará frente en coordinación con la Ertzaintza. Cyberzaintza cuidará de la seguridad pública de Euskadi, persiguiendo el cibercrimen y protegiendo las infraestructura críticas y sensibles.
También se encargará de la protección de infraestructuras y datos públicos. La agencia defenderá y velará por el adecuado funcionamiento de las infraestructuras digitales del sector público vasco.
A su vez, protegerá infraestructuras y datos empresariales, en coordinación con el equipo de promoción económica del Gobierno Vasco. Con ese fin, fomentará una cultura empresarial en la que se tenga en cuenta la importancia de contar con entornos «más ciberseguros y resilientes», que permitan el desarrollo sostenible de la sociedad vasca.
Además, entre las principales funciones de la agencia se incluye investigar y analizar los ciberincidentes y ciberataques; detectar y responder ante ellos, estableciendo criterios y promoviendo medidas de protección adecuadas frente a las ciberamenazas; e identificar y vigilar los servicios públicos críticos y esenciales para proponer medidas adecuadas para su ciberprotección.
Esta entidad ejercerá las funciones de equipo de respuesta a emergencias (CERT) y de respuesta ante incidentes de ciberseguridad (CSIRT), trabajando en coordinación con los organismos nacionales o internacionales para mitigar los efectos y minimizar los daños causados por posibles ataques.
A su vez, tratará de concienciar y promover en la sociedad la importancia de la ciberseguridad, promoviendo programas educativos y campañas de sensibilización para fomentar comportamientos seguros en Internet.
Capacitación
También apoyará la capacitación en materia de ciberseguridad y desarrollo digital seguro a empresas y sectores esenciales de Euskadi, como la sanidad, las emergencias, la seguridad, los servicios sociales, la educación y el transporte. La agencia se encargará, asimismo, de promover y coordinar una estrategia de ciberseguridad común para el conjunto de las administraciones públicas vascas.
A partir de hoy, el Gobierno deberá, entre otras cuestiones, aprobar los estatutos, y designar y nombrar a la persona que dirigirá la agencia, así como a su Consejo Consultivo.
La reunión de este miércoles ha concluido con un análisis de los datos delincuencias del primer semestre de 2023. Según las estadísticas aportadas por el Ejecutivo autonómico, uno de cada cuatro delitos que se denuncian en Euskadi se perpetran ya a través de las nuevas tecnologías.
Más de 12.800 ciberdelitos
En los seis primeros meses del año se han producido 12.878 ciberdelitos, un 31% más respecto al mismo periodo del año pasado. La inmensa mayoría de ellos continúan siendo ciberestafas, que acaparan el 89% del total de este tipo de infracciones legales.
En concreto, se han detectado 11.508 ciberestafas, un 30,5% más que en el primer semestre de 2022. Además, se han registrado ciberfalsificaciones (505, un 9% más que en el primer semestre de 2022), ciberamenazas y cibercoacciones (390, un 8% más que en el primer semestre de 2022), casos de descubrimiento y revelación de secretos a través de las nuevas tecnologías (89, un 2% más), ciberdelitos sexuales (36, un 71% más) y ciberataques (44, un 144% más).