La portavoz de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, ha expresado este miércoles su deseo de que la sentencia que en el año 2019 condenó a un empresario por simular besarla sirva de «antecedente» y siente «jurisprudencia» para condenar al ya expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por un caso de «agresión sexual» por el beso en la boca que propinó a la jugadora de la selección femenina Jenni Hermoso en la entrega de trofeos del Mundial en Sidney (Australia).
En 2019, la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla condenó a un empresario que simuló besar a la entonces parlamentaria andaluza Teresa Rodríguez durante un acto celebrado en la Cámara de Comercio de la capital andaluza el 20 de diciembre de 2016, al pago de una multa de 13.800 euros por un delito de abuso sexual en concurso ideal con un delito leve de falta de respeto y consideración debida a la autoridad. La sentencia fue posteriormente ratificada en su integridad por la Sección de Apelación de la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
Por su parte, el juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge ha citado este viernes a Luis Rubiales como imputado por dicho beso en la boca a Jenni Hermoso, un caso que, en opinión de Teresa Rodríguez, es «muy similar» al que ella sufrió, según ha comentado la dirigente de Adelante este miércoles en una entrevista en Canal Sur Radio recogida por Europa Press.
Ante la gente que dice que «no es para tanto» lo que realizó Rubiales, Teresa Rodríguez ha comentado que «aquí no estamos todos diciendo que sea lo más grave que ha pasado en el mundo, pero sí que es una situación de agresión sexual a todas luces», que además se pudo contemplar en directo gracias a la retransmisión televisiva de la entrega de trofeos de la final del Mundial femenino, según ha subrayado para agregar que en su caso era «mucho más difícil» demostrar el supuesto abuso del empresario, algo que fue posible porque «había una cámara grabando en un pasillo» de la Cámara de Comercio, ya que «todos los testigos testificaron» en el juicio «a favor del agresor», según ha puesto de relieve.
En esa línea, Teresa Rodríguez ha lamentado que «hay como una comprensión todavía, una sensación de empatía con ese tipo de práctica que han sido tan habituales durante tanto tiempo», y frente a ello ha abogado por que «empiece a terminarse» esa comprensión, y que la sentencia de su caso «sirva de antecedente, de jurisprudencia para que haya claramente una sentencia condenatoria por agresión sexual» contra Luis Rubiales.
Al respecto, ha apuntado que en su caso la condena al empresario «fue por abuso sexual porque estábamos con la normativa anterior, pero ahora mismo debería haberla por agresión sexual» contra el expresidente de la RFEF, «con la gravedad que sea, ya que hay distintos grados de gravedad en todos los delitos», según ha abundado.
Para Teresa Rodríguez, «evidentemente» que el comportamiento de Rubiales con la citada futbolista constituye un «delito», y «nadie puede ir agrediendo a otras personas, y menos con ese componente que tiene la agresión sexual y que, de alguna forma, consolida situaciones de desventaja y de discriminación de las mujeres respecto de los hombres», según ha finalizado.